El camino de Apple a convertirse en una de las empresas de tecnología más importantes del planeta no fue fácil. En sus inicios, en el medio y antes de la explosión se encontró con espinas que estuvieron a punto de llevar a la compañía por un acantilado. Steve Jobs se tuvo que marchar de la firma que él mismo fundó para que esta se pudiese salvar.
Lee más sobre Apple y Steve Jobs: [Los cuatro hábitos que identifican que una persona tiene inteligencia superior: Steve Jobs los tenía todos]
Lo que hizo afuera de Apple, al final, fue determinante para su propia salvación. El hoy gigante de Cupertino tiene que agradecer a Steve Jobs y a la empresa NeXT, que fundó en la época en la que se mantuvo alejado de la compañía de la manzana mordida.
¿Qué pasó con NeXT? Es obvio que desapareció, pero pocos saben que sigue viva como parte de la estructura interna de Apple, gracias a que el gigante de Cupertino compró todas sus acciones, como parte de una iniciativa de Steve Jobs.
El objetivo de Jobs con esta firma era vender estaciones de trabajo para el ámbito educativo y no para los consumidores en general, una promesa que hizo a Apple para no interferir en sus planes, pero a los de la manzana mordida no les gustó la decisión del genio y demandó a NeXT por “esquemas nefastos” para aprovechar la información privilegiada de los cofundadores.
“Es difícil pensar que una empresa de 2.000 millones de dólares con más de 4.300 personas no pueda competir con seis personas en vaqueros”, expresó Steve Jobs sobre la demanda, según reseña de Xataka.
Jobs invirtió 12 millones de dólares de su propio dinero para fundar NeXT, convencido del proyecto. Pero los caminos de la vida no fueron como él pensaba: En 1996, Apple adquirió NeXT, Inc.
Un regreso obligado, pero regreso al fin
Esa transacción llevó a Jobs de regreso a la empresa que cofundó y le permitió asumir el cargo de director ejecutivo interino a finales de 1997. Su misión era hacer de Apple una compañía rentable.
Con Microsoft dominando la cuota de mercado, las decisiones subsiguientes de Jobs ayudaron a Apple a pasar de perder 1.040 millones de dólares en 1997 a obtener una ganancia de 309 millones de dólares un año después. Luego, salvó a la empresa y la posicionó en el mercado.
Steve Jobs también redujo las múltiples declaraciones de pérdidas y ganancias de Apple y fue quien implementó el seguimiento de todos los gastos en 1997.
NeXT podría ser considerado como un fracaso: en total vendió 50.000 estaciones de trabajo, pero dejó elementos que salvaron a Apple cuando fue comprada. La tecnología NeXTSTEP se convirtió en el núcleo de Mac OS X y algunos elementos de la interfaz gráfica también nacieron en este SO, como el Dock, el menú servicios, entre otros.
