Un extraño tejido de mucho valor científico (y monetario para su época) fue encontrado en las profundidades de las cuevas del desierto de Judea. El pedazo de tela es la prueba más antigua jamás encontrada de un textil pintado con insectos de escalas, que en la biblia se le conoce como Tola’at Hashani o Gusano Escarlata.
El equipo científico a cargo de estos hallazgos forma parte de la Autoridad de Antigüedades de Israel, la Universidad Bar-Ilan y la Universidad Hebrea de Jerusalén. Según lo expertos que analizaron el hallazgo, tiene una existencia de unos 3.800 años y era muy valorado por la rareza de su color, lo que hacía que tuviera un alto costo.
De acuerdo con los registros históricos del lugar, estos tejidos eran impregnados en las telas del Tabernáculo y los atuendos de los sacerdotes de aquel entonces. Se decía que quienes los llevaban tenían un estatus superior al resto de las personas, hasta el punto de que eran considerados como sagrados.
Los expertos le realizaron análisis mediante Cromatografía Líquida de Alta Resolución (HPLC), en el que encontraron que ese tono rojizo provenía de un color que dan los insectos de escamas dobles de roble.
“La Dra. Naama Sukeni, quien dirigió la investigación en la Autoridad de Antigüedades de Israel , explicó el meticuloso proceso involucrado en la recolección de estos insectos. La recolección solo era posible brevemente cada año cuando el contenido de tinte alcanzaba su pico, destacando la naturaleza laboriosa de la producción de tintes antiguos”, reseñó el portal The Jerusalem Post.
Todo esto lo encontraron gracias a este pedazo de tejido, que sólo mide dos centímetros, y que probablemente fue usado para comercializarse en su época.
Los científicos de la Autoridad de Antigüedades de Israel, la Universidad Bar-Ilan y la Universidad Hebrea de Jerusalén llegaron a la conclusión de que este es uno de los hallazgos más importantes de la historia de los textiles con colores naturales en la historia de la humanidad.