Este jueves 14 de marzo se cumplieron seis años de la muerte de uno de los científicos más importantes de nuestra generación, Stephen Hawking. Sus investigaciones del espacio-tiempo y los eventos que ocurren en los albores el Universo lo llevaron a gozar de un reconocimiento mundial y quedar en los registros históricos de la ciencia.
Su investigación sobre el Universo lo llevó a estar cerca de descubrimientos importantes. Todo el avance que se tiene sobre los agujeros negros, en parte, son por sus cálculos. Además, basados en estos mismos eventos masivos, es que algunos son capaces de hablar de viajes en el tiempo.
Es por eso que en esta reseña lo homenajeamos señalando sus tres descubrimientos más importantes. A lo largo de su vida, Hawking realizó numerosos descubrimientos innovadores que desafiaron las percepciones establecidas y ampliaron los límites de nuestro entendimiento del Universo.
1) En orden cronológico, uno de los hallazgos más destacados de Hawking fue la propuesta de la “Radiación de Hawking” en 1974.
Esta teoría revolucionaria sugiere que los agujeros negros, a pesar de su fama de ser objetos completamente “negros” sin escape de información, emiten radiación térmica debido a efectos cuánticos cerca de su horizonte de sucesos. Este descubrimiento desafió las concepciones previas sobre los agujeros negros y estableció un vínculo crucial entre la mecánica cuántica y la relatividad general de Einstein.
2) En colaboración con otro científico reconocido, llamado Roger Penrose, Hawking desarrolló teoremas sobre las singularidades en el marco de la relatividad general.
Estos teoremas establecen que, bajo ciertas condiciones, como el colapso gravitacional que da lugar a la formación de agujeros negros, la existencia de singularidades espaciotemporales es inevitable. Este trabajo profundizó nuestra comprensión de la naturaleza de las singularidades y su papel en la física cósmica.
3) Curvatura del espacio-tiempo a través de la velocidad de la luz. Según Hawking, al viajar a velocidades cercanas a la de la luz, el tiempo se dilataría, permitiendo a los viajeros espaciales experimentar el tiempo de forma diferente a los que permanecen en la Tierra. Si bien este método es teóricamente posible, alcanzar y mantener velocidades tan altas requeriría una cantidad de energía enorme, actualmente inalcanzable.