NVIDIA domina actualmente casi el 80% del mercado de chips diseñados para inteligencia artificial, generando ingresos que superan los 11.000 millones de dólares en 2021.
Este sector experimentará un crecimiento significativo, según proyecciones de Allied Market Research (AMR), que estiman ventas por encima de los 263.000 millones de dólares para 2031.
Sin embargo, OpenAI podría estar considerando un cambio. A principios de marzo de 2023, se sugirió que OpenAI necesitaría más de 30.000 chips de IA, probablemente de NVIDIA, para mantener el funcionamiento de ChatGPT a mediano plazo.
A pesar del éxito de NVIDIA, OpenAI estaría buscando desarrollar sus propios chips de IA para reducir su dependencia de NVIDIA.
Sam Altman, CEO de OpenAI, estaría en busca de inversores para financiar el desarrollo de estos chips. Además, OpenAI necesitaría colaborar con un fabricante de circuitos integrados capaz de producir la cantidad requerida de semiconductores.
Se rumorea que la empresa está considerando una colaboración con TSMC, un gigante taiwanés conocido por su capacidad de innovación en la fabricación de circuitos.
Microsoft también juega
Mientras tanto, Microsoft, otro actor importante en el campo de la IA, está explorando formas de crear IA más eficiente energéticamente.
El alto consumo de energía de la IA plantea preocupaciones ambientales y económicas significativas, lo que motiva a Microsoft a buscar soluciones para reducir los costos operativos y ambientales asociados con esta tecnología.
Una de las soluciones que Microsoft está considerando es el uso de energía nuclear, aunque esto plantea preocupaciones por los residuos radiactivos. La energía nuclear es un tema polémico en muchos países, y su adopción como fuente de energía para la IA está sujeta a un intenso debate en la comunidad global.