Una gran mayoría de niños y niñas retornan al colegio la primera semana de marzo. Por esta razón, es necesario ir preparando a los estudiantes a retomar sus diversas rutinas y responsabilidades, con el fin de que este regreso, no se convierta en toda una odisea y un cambio de rutinas radical.
La ciencia, principalmente estudios vinculados a la psicología, nos da algunas recomendaciones. Con la famosa ‘vuelta al cole’, también regresan los temidos exámenes, trabajos y odiosa rutina diaria. Para muchos estudiantes, el comienzo del curso es mucho más que la cuesta de septiembre. Es estrés. Es cansancio. Y supone, por desgracia, el fin del verano.
Aprendizajes diferentes
Volver a clase significa, de nuevo, “hincar los codos”. Sin embargo, no siempre se tiene éxito en los estudios. Hasta el mismísimo Santiago Ramón y Cajal, Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 1906, tuvo sus problemas cuando era todavía un tierno alumno en la escuela.
Calificaba el aprendizaje basado en la memorización «como un régimen de terror». Y parece que, un siglo después de sus vivencias, no hayan cambiado muchas cosas en las escuelas. Aprender listas y temarios de memoria parece ser el método preferido, aunque no siempre funcione. Por este motivo, se aconseja buscar técnicas pedagógicas que motiven a los estudiantes.
Las horas de sueño suficiente
El mismo científico planteó la importancia del sueño. Por ejemplo, se planteó que si duermes más, sacarás mejores notas. Un estudio realizado en 2012, y publicado en The Eastern Economic Journal, podría darnos una solución científica para sacar mejores notas. Como sabemos, las horas de sueño son fundamentales para cuidar nuestra salud. Dormir de más o de menos está relacionado con importantes problemas médicos, pues conlleva la aparición de graves enfermedades cardiovasculares. Pero el sueño también podría tener un efecto crucial en nuestro rendimiento académico.
Dormir siete horas permite mejorar el rendimiento académico. Según la investigación de la Brigham Young University, los estudiantes con edades entre los dieciséis y los dieciocho años “deben dormir siete horas para obtener las mejores notas posibles” en sus exámenes. Tras analizar los datos de sueño y del rendimiento en la escuela de más de 1.700 alumnos, los científicos se dieron cuenta que a medida que pasaban los años, los estudiantes dormían menos horas (gráfica inferior izquierda).
A continuación, realizaron diversas pruebas académicas para comprobar cuál era el “tiempo de sueño óptimo”. En el caso de alumnos de entre 16 y 18 años, necesitaban dormir siete horas para mejorar sus resultados en los exámenes.
Revisar las metas cumplidas
También es importante motívarlos con sus logros. Lo ideal es comenzar recordando a tu hijo o hija los logros que alcanzaron el año anterior, así como las cosas nuevas que va a aprender en este periodo escolar que está por partir.
“Como sugerencia, es importante motivar a los niños para que aprendan cosas nuevas, donde será una tarea clave para los padres, proyectar los objetivos claves del año. Esto permitirá crear un espacio de confianza y un retorno motivante para ambos”, asegura Milena Schublin Bisquertt, experta en Educación, Magíster en Gestión, de la Universidad de Barcelona y Rectora del Colegio San Agustín.
Volver a la rutina
Al igual que es importante ir reforzando pequeñas tareas, pequeñas obligaciones. Unos días antes, es recomendable que los niños dediquen algunos minutos a la lectura y ejercicios matemáticos, para estimular su atención y concentración.
“Debemos empezar a preparar a nuestros hijos con pequeñas responsabilidades que favorezcan las rutinas diarias. y de manera especial los hábitos de estudio. Además, favorecer la normalización de horarios para anticiparnos al inicio de clases”, cerró Schublin.
De hecho, según datos del MINEDUC (Ministerio de Educación), un total de 11.285 establecimientos educativos deberán iniciar sus actividades en marzo. Estos atienden a 3,6 millones de estudiantes, de los cuales 3,49 millones corresponden a niños y adolescentes (el resto son adultos).
Luego del largo descanso de las vacaciones de verano, en la mayoría de los casos, los estudiantes olvidan las rutinas que tenían durante el pasado ciclo escolar, lo que complica bastante adaptarse al horario que tienen dentro del año.
Es por esto, que entregamos algunas recomendaciones para que el regreso a clases no se convierta en una pesadilla y puedan sobrellevarlo sin problemas.
Motívalos con sus logros. Lo ideal es comenzar recordando a tu hijo o hija los logros que alcanzaron el año anterior, así como las cosas nuevas que va a aprender en este periodo escolar que está por partir. “como sugerencia, es importante motivar a los niños para que aprendan cosas nuevas, donde será una tarea clave para los padres, proyectar los objetivos claves del año. Esto permitirá crear un espacio de confianza y un retorno motivante para ambos” asegura Milena Schublin Bisquertt, experta en Educación, Magíster en Gestión, de la Universidad de Barcelona y Rectora del Colegio San Agustín .
Visita previa al colegio. Es una buena idea que un día antes del ingreso formal, puedan recorrer el lugar o cercanías del colegio. Muéstrele y comente, mostrando lo entretenido y agradable del lugar. Es importante entregar tranquilidad.
Los compañeros sí importan. Hay que potenciar las cosas positivas de volver a un nuevo ciclo escolar. Por ejemplo, el reencuentro con los amigos, compartir experiencias del verano, conocer nuevos profesores, posibles compañeros nuevos, entre otros.
Pequeñas tareas, pequeñas obligaciones. Unos días antes, es recomendable que los niños dediquen algunos minutos a la lectura y ejercicios matemáticos, para estimular su atención y concentración. “Debemos empezar a preparar a nuestros hijos con pequeñas responsabilidades que favorezcan las rutinas diarias. y de manera especial los hábitos de estudio. Además, favorecer la normalización de horarios para anticiparnos al inicio de clases” comenta Schublin.
Ir juntos por los útiles escolares. Si es posible, cuéntale a tu hijo las cosas que se harán día a día en el colegio. Ojalá compren juntos algunas de las listas de materiales que deben llevar y obviamente que el menor pueda elegir alguno de ellos.