Cuando Sony presentó el Xperia XZ2 en el Mobile World Congress, el ambiente era tenso. Era primera vez en muchísimos años que la marca rompía con su diseño omnibalance.
Pasamos más de una semana ocupando este nuevo terminal, y antes de darles nuestra opinión, vamos con sus especificaciones técnicas:
- Pantalla de 5.7 pulgadas HDR a 1080p
- Procesador Qualcomm Snapdragon 845
- 4 GB de RAM
- 64 GB de almacenamiento ampliable vía microSD
- Cámara de 19 megapixeles a f/2.0
- Cámara frontal de 5 megapixeles a f/2.2
- Batería de 3180 mAh
Adios Omnibalance
Al contrario de todos los lanzamientos móviles de Sony desde hace seis o más años, aquí se rompe el diseño omnibalance y se reemplaza por una suerte de mitad de esfera, donde no hay espacio que no sea curvo en su posterior.
Su lenguaje de diseño rememora en partes al HTC U11, con un acabado brillante y muy reflectante.
Nada rompe su armonía y es tan meticulosa la atención al balance que el lector de huellas está casi al medio del teléfono.
Lo anterior me provocó más de un problema y jamás logré acostumbrarme a su posición tan baja, me vi poniendo el dedo en la cámara más veces de las que pude contar, ensuciándola. Claro que es un tema de costumbre, pero si vienes de usar cualquier equipo con lector atrás, será una curva de aprendizaje de varios días.
Su peso (198 gramos) y su ancho 11.1 mm se sienten. No es un equipo de bajo peso ni de perfil delgado. En parte esto ayuda a entregar una sensación más premium.
Como un gama alta
Como es de esperarse con este procesador y RAM, el rendimiento es buenísimo. Además la capa de Sony sobre Android, donde no existen muchas mejoras en comparación a equipos anteriores, a excepción de remover harto bloatware (gracias, al fin), corre, por lo general muy bien.
La batería logró entregar un promedio de, con uso intenso, 5 horas y un poco más de pantalla encendida. Bastante normal y correcto para la capacidad de la batería.
La reproducción de color y brillo de la pantalla son espectaculares. Nada que decir, Sony sabe lo que hace cuando se trata de paneles.
El equipo presenta un truco nuevo gracias al motor de vibración, en el que en aplicaciones de video compatibles y juegos, el equipo tiembla en concordancia con el contenido en la pantalla. Está bien logrado, pero honestamente es un artilugio que no entrega mayor inmersión y a la larga, después de la novedad, solo sirve para gastar más batería.
Novedades reforzadas
Aquí Sony refuerza varios puntos de entregas pasadas, como la súper cámara lenta a 960 cuadros, pero ahora en Full HD. En su momento describimos esto como un truco novedoso, pero sin mayor utilidad. Ahora dan ganas de usarlo más porque se ve mucho menos granulado, pero aún así no pasa a ser algo más que un gimmick chistoso, además preferí seguir usándolo en HD porque sino era muy corto el lapso de cámara lenta.
La calidad de las fotos es «muy Sony», con su tan característico tinte y calidad, con fotos predictivas que ayudan mucho cuando el objeto está en movimiento, y ahora con mejor rendimiento en poca luz, cosa que estaba al debe en los gama alta de la japonesa. Puedes revisar todas las fotos en este link.
Su grabación de video es excelente gracias a su estabilización y la capacidad de grabar en 4K HDR. Lamentablemente, con HDR prendido, aunque sea en Full HD, hay un pequeño error donde el video no alcanza a captar más de 24 cuadros, por lo que se ve algo cortado. Pareciera que esta característica no está bien cocinada aún. Ojalá se pueda arreglar con una actualización, sino, es un poco decepcionante.
Por cierto, aún tiene la capacidad de escanear rostros y objetos en 3D, algo que, como las otras características del equipo, si no tienes un uso muy puntual, no pasan a ser algo más allá que un truco entretenido. Los resultados son buenos en general, sobretodo si la luz es la correcta. Ahora también se puede lograr con la cámara frontal (ejemplos en la galería).
Mantiene el botón dedicado a la cámara en la parte inferior del costado derecho. Hay gente que ama esta característica casi única de Sony. A mí no me aporta mucho, pero le da originalidad.
¿Vale la pena?
Más allá de una actualización de los interiores del equipo, el XZ2 no entrega mucho valor agregado por encima de su predecesor, el XZ Premium.
El cambio de diseño ayuda y el hecho de llevar el peso de una marca que entrega tanta confianza y que arrastra una fanaticada fiel le pueden ayudar, pero en comparación a los otros equipos de la gama alta, la tiene bien difícil.
Es un buen equipo, pero que llega algo tarde a nuestra región y que la misma marca está matando, porque ayer se confirmó que existirá el «XZ2 Premium», con doble cámara, mayor batería y pantalla 4K.
Sony ha sido particularmente celoso con el tema del precio en prepago, pero en Chile se ofrece en un rango que va desde los CLP $649.990 y los CLP $699.990. En México está a MXN $19.189 $17,999.00 (corrección entregada por Sony Mobile México).
