Esta tarde Apple anunció sus resultados financieros correspondientes al cuarto trimestre de su año fiscal, el que terminó el pasado 27 de septiembre, donde reportó ingresos por USD$42.123 millones y ganancias netas por USD$8.467 millones. En contraste, Apple obtuvo ingresos por USD$37.472 millones y ganancias netas por USD$7.512 millones durante el mismo periodo el año anterior.
Sin embargo, llama la atención que si bien Apple celebra un aumento espectacular en ventas de sus smartphones (vendieron 39 millones de iPhones este último trimestre mientras que en el mismo periodo el año anterior vendieron 33 millones), las cifras no son tan positivas para el tablet de Cupertino.
Apple anunció que vendieron un poco más de 12,3 millones de tablets los últimos tres meses, o sea, una caída en un 13% respecto al mismo periodo el año anterior. En contraste, las ventas de los iPhones aumentaron en un 12% y de los Macs en un 25% respecto al mismo periodo en 2013.
Esto marcaría una tendencia que llegó para quedarse, y que demostraría que el tablet no reemplazará al computador como muchos en algún momento más optimista estimaron. Entre los motivos de esta caída en la venta de tablets algunos especulan que se debe al tamaño cada vez mayor de las pantallas de celulares. O sea, un potencial usuario de Apple podría pensar “¿para qué comprar un iPad mini si el nuevo phablet de Apple no es mucho más pequeño?“