La liberación del codec VP8 y el anuncio del proyecto WebM por parte de Google, fue un tremendo remezón para el grupo MPEG-LA, responsables del codec de video H.264 y del cual les hemos comentado en extenso sobre las polémicas en las que se ha visto, abarcando: Demandas, amenaza y dominio en la red.
Uno de los grandes problemas en el licenciamiento de codec, es que entre todos, infringen patentes bastante absurdas y esto puede provocar una seguidilla de juicio en la corte que no favorecen a nadie. Google, que todo lo sabe, quiso ponerse el parche antes de la herida y desde ahora el proyecto WebM (que incluye VP8 y Ogg) tiene refugio en una licencia BSD, específicamente Apache y GPLv3.
Google necesitaba desacoplar la parte con copyright de WebM, luego de esto podría optar a una licencia GNU General Public Licence (GPL). En otras palabras, no es necesario crear una nueva licencia open source y la patente se puede conceder por sí misma.
Legalmente utilizar la licencia GPL significa que en caso una compañía demande a Google, el proyecto WebM puede seguir como si nada hubiera pasado, redistribuyendo el código normalmente y sólo se ve en conflicto la patente. En caso una patente no esté amparada por GPL, simplemente se prohibe para siempre el uso en conjunto o por separado de los componentes demandados.
Link: Google resolves WebM licensing conflict with BSD license (Arstechnica)