Cuando Elon Musk terminó viéndose prácticamente obligado a comprar Twitter muchos proyectaban que la red social entraría a una etapa turbulenta y tal vez turbia. El incidente con el lanzamiento de Ron DeSantis como candidato a la Presidencia de Estados Unidos resultó el perfecto ejemplo de este desastre.
Marcando la magnitud de esta situación donde muy pocos dimensionamos lo que le haría el antes hombre más rico del mundo a esta red social, que sí, se había convertido en un semillero de bots, desinformación, noticias falsas y sock puppets.
Sin embargo lo cierto es que, de una forma u otra, la compañía se mantenía involucrada en proyectos e iniciativas diseñadas para intentar combatir este fenómeno y convertir el sitio en un lugar más confiable y amigable para todas y todos.
Hasta que llegó Elon Musk y comenzó con su política extrema de recortar gastos al máximo, lo que llevó a expulsar a la red social de varios proyectos e iniciativas. Lo que nadie esperaba es que el ejecutivo incluso retirara a Twitter de algunos lineamientos indispensables y hasta obligatorios en materia legal.
Elon Musk retira a Twitter de proyecto de la Unión Europea contra la desinformación en la web
De acuerdo con un reporte de la BBC, Twitter se ha retirado de un acuerdo voluntario de la Unión Europea para combatir la desinformación, un pacto al que otras plataformas de redes sociales ya se habían adherido desde hace bastante tiempo.
Pero ahora, el comisario europeo Thierry Breton, acaba de revelar a través de su cuenta oficial en la red social de Musk que Twitter acaba de abandonar su participación en el proyecto del Código de buenas prácticas contra la desinformación de la Unión Europea:
“Twitter abandona el Código de prácticas voluntario de la UE contra la desinformación. Pero las obligaciones permanecen. Puedes correr pero no puedes esconderte.
Más allá de los compromisos voluntarios, combatir la desinformación será una obligación legal bajo el #DSA a partir del 25 de agosto. Nuestros equipos estarán listos para su aplicación.”
En otras palabras, la participación que antes era voluntaria pronto se convertirá en una obligación legal según una ley recientemente promulgada por la propia Unión Europea.
Twitter se había integrado a este proyecto en el año 2018, donde dicho proyecto de Código forma parte de la Ley de Servicios Digitales (DSA) de la UE, que impone normas estrictas a 19 “plataformas en línea muy grandes” o VLOP por sus siglas en inglés.
Twitter, Google, Microsoft, Tiktok, Facebook e Instagram entre otras formaban parte de este proyecto, donde se busca que cooperen todos los involucrados para encontrar estrategias conjuntas que disminuyan la desinformación.
Esta situación contradice absolutamente declaraciones pasadas de Elon Musk, quien al convertirse en su nuevo dueño había declarado que su misión era convertir a Twitter en “la fuente de información más precisa sobre el mundo”.
Eso sí, si Musk se mantiene sin cumplir podría ser acreedor a una multa enorme que puede llegar hasta el 6% de su facturación anual mundial e incluso Twitter podría ser bloqueado en Europa.