Hace algunos años el panorama con el naciente segmento de los teléfonos inteligentes con pantallas plegables lucía muy distinto al escenario actual.
Con Huawei rondando en lo alto de la industria y con importantes proyectos en esa área próximos a desarrollarse todo apuntaba a que la guerra entre fabricantes dentro de ese ramo vivirían un pleito tan duro como el que se observa hoy con plataformas de streaming del calibre de Disney Plus, Netflix y HBO Max.
Sin embargo los giros abruptos, las regulaciones, sanciones y movimientos políticos terminaron alterando el curso y destino de los smartphones flexibles. Donde al final pareciera que Samsung se quedó como el único con productos en dicha línea.
Hoy tenemos oportunidad de conocer un poco de las cifras en torno a esta industria con esta clase de terminales y lo comprobamos.
Samsung es el amo gracias a la familia Galaxy Z
La gente de Display Supply Chain Consultants (DSCC) ha publicado los datos de su más reciente análisis financiero y de cuota de mercado con respecto al segmento de teléfonos con pantallas plegables. Todo para encontrar que Samsung es el amo absoluto de este terreno.
Al día de hoy, tras el cierre del tercer trimestre de 2021, el fabricante surcoreano sería dueño del 93% de este negocio. Lo que quiere decir que nueva de cada diez unidades circulando en el mercado pertenecen a esta marca. Del remanente en la cuota Huawei es dueño del 6% del mercado, y el restante se reparte entre las pocas opciones mucho menos funcionales de otras empresas.
El secreto para crecer y consolidarse a tal grado es que los costos de producción se redujeron lo que permitieron hacer maniobras con los márgenes de ganancia para que los teléfonos fueran distribuidos por precio más bajo. Eso sin contar las promociones y empaquetados con los que se vendieron el Galaxy Z Fold 3 y el Galaxy Z Flip 3 para volverlos más atractivos.
La perspectiva, según DSCC, es que este mercado siga creciendo, en 2021 distribuyeron 7,5 millones de unidades y para el siguiente año 2022, la proyección es que se llegue a los 17,5 millones de teléfonos enviados. Con todo y crisis global por la escasez de componentes.
Si las cifras se comparan con los líderes en el mercado convencional de smartphones encontramos que en realidad se trata de un segmento aún en desarrollo. Pero la perspectiva de crecimiento es positiva.
