El triunfo de Donald Trump en la presidencia de los Estados Unidos desató el radicalismo político de Elon Musk, que se vio reflejado en posteos de su propia red social, X, anteriormente llamada Twitter.
El magnate sudafricano, que tendrá un puesto en el gabinete del nuevo mandatario norteamericano, lanzó mensajes discriminatorios contra minorías y movimientos sociales. Su comportamiento hizo que medios de comunicación del alcance global y personalidades de talla internacional tomaran la decisión de suspender sus cuentas en la plataforma.
Medios como The Guardian, La Vanguardia, personalidades como Jamie Lee Curtis o los fanáticos de Taylor Swift tomaron la decisión de alejarse de sus cuentas de X, por el comportamiento de Elon Musk.
Así como estas personalidades e instituciones hay miles de usuarios que se fueron de X, para seguramente encontrarse en Bluesky, red social muy similar a lo que era Twitter. Tiene sentido, ya que esta plataforma fue creada por Jack Dorsey, fundador de la antigua red social del pajarito.
Bluesky emula al viejo y entrañable Twitter
Todo lo que vemos de esta app huele a Twitter. Su logo, tipografía y colores son idénticos a la ex red social del pajarito. El celeste y el blanco predominan en las imágenes y en lugar de ser un ave, Bluesky tiene una mariposa.
Ver el Feed es prácticamente ingresar a Twitter, no nos podemos engañar. Aunque claramente vamos a hablar de algunas diferencias que tiene esta nueva plataforma de redes sociales.
Cuando nos vamos hacia su funcionamiento, aunque se parece, tiene ciertas diferencia a Twitter. Bluesky se presenta a sí misma como la opción ideal para los bloggeros del mundo, que se encargan de contar en redes sociales sus diferentes experiencias.
Explicado en detalles técnicos, Bluesky se basa en un protocolo abierto llamado ADX, que permite a cualquiera crear y operar su propia red social compatible. Esto contrasta con la estructura centralizada de Twitter, donde la empresa tiene control total sobre la plataforma. Es decir que es una app descentralizada.
Bluesky busca que las diferentes redes sociales que se construyan sobre ADX puedan interoperar entre sí. Esto significa que los usuarios podrán comunicarse y compartir contenido sin importar en qué red social se encuentren.
Los creadores dicen que la plataforma busca dar a los usuarios más control sobre sus datos y su experiencia en la red social. Esto incluye la posibilidad de elegir cómo se moderan los contenidos y cómo se utilizan sus datos personales.