El magnate Elon Musk, conocido por expresar públicamente su desagrado hacia Mark Zuckerberg, podría estar tomando notas del modelo de control de negocios del fundador de Meta, según informes recientes.
A pesar de la aparente animosidad entre Musk y Zuckerberg, el CEO de Tesla estaría buscando un mayor control en su empresa, inspirándose en la estructura de Meta. Musk amenazó con detener el desarrollo de productos de inteligencia artificial y robótica para Tesla si no obtiene más control en la compañía.
El objetivo de Musk es alcanzar un 25% de control de votos en Tesla, a pesar de poseer solo el 13% de las acciones. Este deseo de mayor influencia coincide con el modelo de Meta, donde Zuckerberg, con un 13% de las acciones, tiene más del 50% de control debido a sus “superacciones” que otorgan 10 votos por acción.
Sin embargo, imponer una estructura dual de acciones en Tesla, similar a la de Meta, podría ser “casi imposible” según expertos, ya que Tesla fue registrada como pública en Delaware en 2010.
Musk expresó su frustración ante la falta de respeto percibida por parte de los accionistas externos y destacó su aspiración de tener un control significativo pero sujeto a la posibilidad de ser derrocado si la mayoría de los accionistas lo decidiera.
La situación actual en Tesla, con cuestionamientos sobre su comportamiento y el impacto negativo de la compra de Twitter en las acciones de la compañía, sugiere una debilidad significativa en la posición de Musk.
El magnate también enfrenta un juicio pendiente relacionado con paquetes de compensación y su influencia en la junta de directores de Tesla.
