La automatización impulsada por la inteligencia artificial (IA) tendrá un impacto desproporcionado en los trabajos realizados por mujeres, según un informe de la UNESCO y el Fondo Monetario Internacional. A medida que la tecnología avanza, se plantean preocupaciones sobre la brecha de género que se está ampliando.
Un ejemplo destacado es Grace, una enfermera robot desarrollada por Hanson Robotics en Hong Kong, diseñada para atender a pacientes de la tercera edad durante la pandemia de Covid-19. Aunque este avance en ciencia y tecnología puede ser aplaudido, también plantea interrogantes sobre cómo la tecnología y la IA pueden fomentar la desigualdad de género.
Como recuerda Expansión, en 2019, el Fondo Monetario Internacional estimó que 26 millones de empleos desempeñados por mujeres en 30 países corren el riesgo de desaparecer en las próximas dos décadas debido a la llegada de nuevas tecnologías.
Según el informe, el 11% de los empleos ocupados por mujeres están en peligro de automatización, en comparación con el 9% de los hombres. Las mujeres con niveles educativos más bajos y de mayor edad se verán especialmente afectadas.
La brecha tecnológica, clave
El estudio de la UNESCO “The Effects of AI in the lives of Women” elaborado en 2022, destaca varias barreras que deben abordarse. En primer lugar, existe una brecha de acceso a la tecnología, ya que solo el 48.3% de las mujeres en todo el mundo tienen acceso a Internet en comparación con el 55.2% de los hombres. Esto se debe en parte a que las mujeres tienden a sentirse menos cómodas utilizando la tecnología y tienen menos habilidades digitales.
En segundo lugar, el estudio destaca la falta de participación de las mujeres en el desarrollo de la IA. Las empresas de IA y robótica siguen estando dominadas por hombres en puestos de liderazgo. Esto se refleja en conferencias y en el porcentaje de profesores en el campo de la IA, donde más del 80% son hombres.
Sin políticas que fomenten la formación de mujeres en carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), las mujeres tendrán un acceso limitado a los trabajos del futuro.
La tercera barrera destacada en el informe es la perpetuación de los estereotipos de género y los roles tradicionales asignados a las mujeres, algo que los sistemas de IA a menudo refuerzan.
Para mitigar la brecha de género en el ámbito laboral causada por la IA, el informe de la UNESCO propone soluciones, como fomentar la educación y la participación de las mujeres en carreras STEM. En países como México, existen organizaciones sin fines de lucro, como Tecnolochicas, Chicas en Tecnología y Epic Queen, que buscan cerrar esta brecha de género de manera gratuita.
Además, recomienda tener en cuenta la complejidad contextual y cultural de los sistemas de IA en diferentes países y contextos laborales. También se enfatiza la necesidad de la colaboración entre gobiernos, empresas privadas y comunidades técnicas para abordar estos problemas y asumir la responsabilidad del impacto de las herramientas y sistemas de IA.