En un reciente descubrimiento, el Webb ha captado una imagen de un cúmulo de galaxias que revela una formación enigmática: un par de galaxias dispuestas de tal manera que parece que están formando un signo de interrogación gigante en el espacio.
Este hallazgo, que no solo fascina por su aspecto visual, también tiene profundas implicaciones para nuestra comprensión del universo, ya que la imagen revelada muestra el cúmulo de galaxias MACS-J0417.5-1154, un sistema galáctico tan masivo que su gravedad distorsiona el espacio-tiempo a su alrededor.
Este fenómeno se conoce como lente gravitacional, y es una de las predicciones más fascinantes de la teoría de la relatividad general de Albert Einstein. En términos sencillos, la gravedad del cúmulo actúa como una enorme lupa cósmica, curvando la luz que pasa cerca de él y estirando y distorsionando la imagen de las galaxias situadas detrás de él.
En este caso particular, la alineación casi perfecta entre la Tierra, el cúmulo de galaxias y la galaxia objetivo ha producido un efecto visual inusual: la galaxia distante, en lugar de aparecer como una sola entidad, se muestra repetida cinco veces a lo largo de la imagen, creando una figura que se asemeja a un signo de interrogación. Este tipo de configuración se denomina lente gravitacional umbilical hiperbólica y es extremadamente rara, con solo unas pocas observaciones similares registradas en el universo conocido.
Un tesoro de datos para los astrónomos
El telescopio Webb, equipado con instrumentos de última generación, ha utilizado tanto el NIRCam (Near Infrared Camera) como el NIRISS (Near Infrared Imager and Slitless Spectrograph) para obtener esta imagen. El NIRCam ha capturado la imagen en detalle, mientras que el NIRISS ha permitido a los investigadores examinar la formación de estrellas dentro de las galaxias distantes.
La observación de la formación estelar es crucial porque las tasas de formación de estrellas pueden aumentar significativamente durante procesos como la fusión o colisión de galaxias.
Vicente Estrada-Carpenter, astrónomo de la Universidad de Saint Mary, explica la importancia de estos datos. Dice que “comprender cuándo, dónde y cómo ocurre la formación de estrellas es fundamental para descifrar la evolución de las galaxias a lo largo de la historia del Universo”.
Las imágenes revelan que las galaxias en el signo de interrogación muestran una actividad estelar intensa en regiones compactas, probablemente como resultado de la interacción del gas entre las dos galaxias; sin embargo, a pesar de esta actividad, las estructuras de las galaxias parecen relativamente estables, sugiriendo que están en las primeras etapas de su interacción.
Un vínculo con el pasado galáctico
Además de su aspecto visual intrigante, este descubrimiento ofrece una visión única del pasado de nuestra propia galaxia, la Vía Láctea. Según Marcin Sawicki, también de la Universidad de Saint Mary, “estas galaxias, vistas hace miles de millones de años cuando la formación estelar estaba en su apogeo, son comparables a la masa que la Vía Láctea podría haber tenido en ese momento”.
La capacidad de Webb para estudiar estas antiguas galaxias permite a los astrónomos observar cómo era nuestra propia galaxia durante su juventud, proporcionándonos una valiosa perspectiva sobre su evolución.
Futuro prometedor para la investigación astronómica
Este hallazgo, publicado en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, no solo añade un capítulo fascinante a la historia de la astronomía, sino que también abre nuevas puertas para futuros descubrimientos.
Y es que la capacidad del telescopio para observar fenómenos tan distantes y antiguos continúa ampliando nuestras fronteras de conocimiento y ofreciendo nuevas perspectivas sobre el vasto y misterioso universo que habitamos.