Frank Rubio regresó a la Tierra. Todo es fiesta y alegría para la NASA que tiene de vuelta a su astronauta récord de vuelta en la superficie de nuestro planeta. El científico norteamericano, de origen salvadoreño, aterrizó en una localidad kazaja llamada Zhezkazgan, y tras diferentes estudios y análisis fue montado en un avión para volar hacia los Estados Unidos.
Para muchos fue una sorpresa verlo bajar del avión caminando apenas 24 horas después de su aterrizaje. Estar en el espacio, sometido a la microgravedad durante un año no es cosa fácil ni siquiera para la persona que la mejor forma física. Entonces, todos se preguntarán: ¿Cómo hizo? La respuesta la tiene la misma Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés).
Es conocido que cuando un astronauta pasa tres o seis meses en el espacio, el proceso para volver a caminar es complicado.
En general, los astronautas pueden tardar varios días o incluso semanas en volver a caminar con normalidad. Esto se debe a que la falta de gravedad en el espacio provoca una pérdida de masa muscular y densidad ósea, lo que dificulta el movimiento.
El caso de Frank Rubio parece inusual, pero para los científicos no es así. La NASA informó que Frank pudo caminar de forma independiente unas 24 horas después de su regreso a la Tierra. Sin embargo, todavía tenía dificultades para subir escaleras y realizar otras actividades que requieren una buena condición física.
La clave para que Frank Rubio pudiese caminar
La microgravedad es el factor que afecta mayormente a quienes están en el espacio durante mucho tiempo. Para contrarrestar sus efectos, la NASA tiene años utilizando un dispositivo llamado cinturón antigravedad o anti-G suit.
Básicamente permite que el flujo de sangre se mantenga en su lugar correspondiente y que los efectos negativos se disminuyan considerablemente.
El cinturón antigravedad es una prenda de vestir que se coloca alrededor del torso y las piernas del astronauta. Está diseñado para ejercer presión sobre los vasos sanguíneos, lo que ayuda a evitar que la sangre se acumule en la cabeza y el pecho.