Joker (2019), la primera película con Joaquín Phoenix en el rol fue una excelente película, por lo que una segunda parte interpretada por él generó una alta expectativa por parte del equipo. Siempre ha existido un debate respecto al “mejor Guasón” (o Joker como nos hemos acostumbrado en el mundo globalizado), pero al parecer, la segunda parte no sería la joya esperada.
Dan Pallares fue el encargado de ir a analizar esta nueva entrega, en una sesión especial de la película, un día antes de su estreno. Aquí, su análisis.
The Joker: interpretar al personaje resulta en un desafío no menor
Existen muy pocos villanos con una personalidad tan interesante y carismática como para lograr ser tan atractivos como el héroe de su historia. En ese campo, probablemente uno de los villanos por excelencia sea el Guasón (o Joker, como es referido mayormente en la actualidad) y es por esto mismo que escribir, adaptar e interpretar a este personaje resulta en un desafío no menor, dentro del que destacan algunas recordadas iteraciones.
En la serie de televisión de Batman de los años 60, Cesar Romero nos mostraba a un Guasón muy apegado al estereotipo de mafioso de la época, con gran carisma y una personalidad bien caricaturesca, que iba muy acorde al tono de la serie.
En 1989 vimos la llegada de la primera película “live action” del caballero de la noche, interpretado por Michael Keaton y un notable Guasón interpretado por Jack Nicholson, que no solo nos mostró esa faceta cómica que ya habíamos visto en la versió de Romero, también la contrastó de excelente manera con una personalidad más violenta, con esos rasgos de psicopatía que calzan tan bien con la expresividad del actor, y a eso, se le suma el haber mostrado cómo el personaje de Jack Napier, tras un accidente químico, se convierte en el príncipe payaso del crimen.
Posteriormente, en 2005 se dio inicio a una nueva saga cinematográfica de Batman con “Batman inicia” y en 2008 llegaría su secuela, “El caballero de la noche” donde vimos el nacimiento de una de las encarnaciones más elogiadas del personaje, quizá solo comparable a la de la serie animada de los 90 interpretada por Mark Hamill.
En esta ocasión fue Heath Ledger el encargado de darle vida al personaje, y si Jack Nicholson ya había hecho un gran trabajo explorando la locura del mismo, en la versión de Ledger, se fue un poco más allá y se le dio una personalidad notoriamente más “psicópata”, dándole una mayor profundidad a dicha característica, indagando en la psicología del personaje y en los orígenes de dicha personalidad, haciendo de este personaje no solo un “criminal loco”, también un estratega capaz de jugar con la mente de quienes lo enfrentan, llevándolos a los extremos y dejando en claro que no tiene mayor motivación más que el caos que puede ocasionar.
La conexión con Joker de 2019
En el año 2019 pasa algo que teniendo en cuenta lo que se había hecho hasta el momento, era poco convencional y llega una película en solitario del Guasón, sin enfrentarse ni vincularse a ninguna versión antes expuesta del caballero de la noche, solo pretendiendo contar una especie de historia de origen del personaje (sumada a las distintas versiones que ya existen).
“Joker” de 2019, llegó de la mano del director Todd Phillips y protagonizada por Joaquín Phoenix, y como si de una evolución natural se tratase en la construcción de cada adaptación del personaje, en esta versión, se podría decir que nuevamente se explora de otra manera la principal característica de la iteración anterior.
En este caso, la locura y la mente del Guasón, pero esta vez mostrándonos en mayor detalle las vivencias, situaciones y condiciones que llevan a Arthur Fleck lentamente hacia la locura, en una cinta que no solo manejaba un lenguaje audiovisual excelente, sino que además nos mostró un Guasón muy distinto.
Uno más histriónico (o teatral si se prefiere), enfatizando en los complejos y las emociones de Arthur constantemente, llegando en ocasiones a hacerlo ver indefenso ante lo que le rodea, pero esto solo hasta que se deja llevar por sus emociones, pues puede llegar a ser totalmente brutal y esto, queda plasmado con un nivel de violencia gráfica que deja poco espacio para las dudas.
La brutalidad, la locura y los giros de trama fueron para muchos, los puntos más memorables de esta encarnación del personaje, por lo que el escepticismo de los fans se hizo presente cuando se anunció una secuela de la cinta, que también introduciría al personaje de Harley Quinn (interpretada esta vez por Lady Gaga), generando alta expectativa en la historia que se contaría y el cómo se trataría, más aún, teniendo en cuenta la desabrida experiencia entregada años atrás con esos mismos personajes en “El escuadrón suicida” (2016).
Joker y Harley Quinn
“Joker 2: Folie a deux” Finalmente llega a los cines y entre quienes ya han podido verla, ha tenido opiniones bastante divididas. La cinta, nos sitúa tiempo después de los acontecimientos de la primera parte, con Arthur Fleck encerrado en el hospital de Arkham, próximo a enfrentar el juicio por los asesinatos que cometió, es ahí, donde conocerá a Harley Quinn iniciando la dinámica entre ambos personajes, pero abordándola de una manera bastante diferente a lo que se conoce como su historia de origen.
Por otra parte, en esta secuela, el director, Todd Phillips, se aventuró con un género que difiere mucho de lo que se hizo en la primera película, haciendo de esta secuela un musical, aspecto que para algunos fans puede llegar a ser un punto en contra, sin embargo, hay que decir que prácticamente todo lo demás que se podía destacar de la primera entrega, se vuelve a lucir aquí, pues las actuaciones, la fotografía, el cuidado al detalle en todo el apartado estético, no dejan nada que desear.
A pesar de que la Harley Quinn de Lady Gaga, al igual que el Guasón de Phoenix, se aleja de las concepciones más “tradicionales” del personaje, logra darle un toque propio que hace sentir esa locura que le caracteriza y que hace tan buen juego con el Guasón, en todo momento.
Joaquín Phoenix por otra parte, nuevamente brilla cada vez que le toca demostrar la locura de Arthur, eso sí, es posible que haya quienes no se sientan conformes con cómo está escrito el personaje en esta entrega, pues si en el final la primera parte, la locura de Arthur llegaba a los extremos, se siente como que esta vez hay un cierto retroceso en ese aspecto, por lo que quienes tengan expectativas de tomar el final de la primera película como una base para luego ir en ascenso, pueden toparse con algo que no esté en esa línea.
Conclusiones: lo técnico bien, el guion un poco en deuda
Si bien, todo el apartado técnico y las actuaciones están al nivel de la primera parte, hay un elemento que aunque logra complementar ciertos momentos correctamente y darle sentido a algunos elementos de la trama, a ratos puede llegar a entorpecer el ritmo de la misma, haciendo que ciertas partes puedan sentirse más extensas de lo necesario, pero esta es una película que vista con la debida paciencia, entrega un cierre tan impactante como el anterior, aunque por motivos diferentes.
A pesar del riesgo que se tomó con el género musical, el cómo esto puede dar la sensación de entorpecer el ritmo de la trama o hacerla sentir más extensa de lo debido y el cuestionamiento de los fans sobre si era realmente una buena idea aventurarse con una secuela, siguen existiendo varios elementos destacables que hacen que valga la pena la experiencia. Para bien o para mal, esta es una película que no dejará a nadie indiferente.
El equipo FayerWayer tuvo acceso a Joker 2 Folie à Deux por gentileza de Warner Latam.
