Bill Gates está preocupado por la variante Ómicron del COVID-19, y advierte: “Podríamos estar entrando en la peor parte de la pandemia”.
El multimillonario, en una serie de tuits, opinó sobre los graves efectos que podría tener en Estados Unidos y el mundo, donde cada día se propaga más la variante.
“Tenemos que tomarlo en serio hasta que sepamos más al respecto”, señaló el fundador de Microsoft. “Incluso, si es solo la mitad de grave que Delta, será el peor aumento que hemos visto hasta ahora, porque es muy infecciosa”.
Para Gates, esta ola generada por Ómicron podría durar tres meses en Estados Unidos.
“Esos pocos meses podrían ser malos, pero sigo creyendo que si tomamos las medidas correctas, la pandemia puede terminar en 2022″, indicó el multimillonario.
“Sé que es frustrante entrar en otra temporada navideña con el COVID-19 amenazándonos. Pero no será así para siempre. Algún día la pandemia terminará y, cuanto mejor nos cuidemos, más pronto llegará ese momento”.
El balance del COVID-19 en Estados Unidos y las medidas de Joe Biden
Estados Unidos es el país más afectado por el COVID-19. Hasta este jueves, han fallecido 810 mil personas producto de la enfermedad, de un total de 51.5 millones de casos.
En todo el planeta han muerto 5.38 millones de personas, de un total de 277 millones de contagios.
El presidente Joe Biden anunció que se abrirán sitios federales para la vacunación de los ciudadanos, destinando además 500 millones de pruebas caseras disponibles desde enero de 2022.
No obstante, Biden señaló que no tomará medidas más drásticas. “Esto no es marzo de 2020 (…) 200 millones de personas están completamente vacunadas”, señaló esta semana.
La preocupación de Bill Gates sobre Ómicron, más que justa
Pero la preocupación de Gates es válida, y se une a la de los científicos en Estados Unidos. Según los datos más recientes, la variante Ómicron representa en la actualidad el 73% de los casos nuevos registrados en el país.
La Universidad Johns Hopkins indicó que Estados Unidos promedió más de 148 mil nuevos casos por día durante la última semana, un 23% más que hace una semana, volviendo a los niveles vistos por última vez en septiembre.
Para este miércoles, casi 70 mil pacientes con COVID-19 se encontraban hospitalizados en Estados Unidos, respecto a las 45 mil personas del 8 de noviembre. Estas cifras pertenecen al Departamento de Salud y Servicios Humanos, citado por la CNN.
“Todos tenemos que cuidarnos unos a otros, especialmente a los más vulnerables, ya sea que viva en la calle o en otro país”, recalca Gates. “Eso significa usar mascarillas, evitar las grandes reuniones en interiores y vacunarse. Obtener un refuerzo brinda la mejor protección”.