¿Adiós a la privacidad? Las críticas llueven sobre ProtonMail, un servicio de correo electrónico cifrado, luego de entregar a autoridades suizas la dirección IP de un activista francés.
Nacida en 2013 tras las revelaciones del extrabajador de la NSA, Edward Snowden, sobre las prácticas de vigilancia masiva de las agencias estadounidenses, ProtonMail enfrenta una nueva realidad.
El servicio entregó la dirección IP de un activista francés, como parte de una investigación. La clave está en que la sede de la compañía está en Suiza, y por lo tanto debe cumplir con la ley del país.
Las autoridades francesas contactaron a las suizas, pidiendo ayuda con la dirección IP del activista. ProtonMail debió ceder.
El activista forma parte de un grupo de okupas que luchan contra la especulación inmobiliaria. A principios de septiembre publicaron un artículo en un sitio web anticapitalista, donde hablan sobre las investigaciones en su contra.
La policía francesa solicitó la dirección IP para descubrir la identidad del activista que utilizó una cuenta de ProtonMail.
La posición de ProtonMail
Andy Yen, fundador y CEO de la empresa, defendió la acción. “Proton debe cumplir con la ley suiza. Tan pronto se comete un delito, las protecciones de privacidad pueden suspenderse, y la ley suiza nos exige que respondamos a las solicitudes de las autoridades”.
No obstante, aclaró que no cooperaron ni con la policía francesa ni con Europol: “Son solicitudes extranjeras aprobadas por autoridades suizas”, de acuerdo con el informe de transparencia de la empresa liderada por Yen.
Igual, el daño está hecho y las críticas no cesan en su contra.
Francia no es el primer país que realiza solicitudes de este tipo al servicio. ProtonMail señala que recibió 13 peticiones de este orden en 2017, aumentando a 195 en 2020. La empresa impugnó tres pedidos en 2017, pero en 2020 rechazó 750 solicitudes de datos.
De acuerdo con Tech Crunch, el monitoreo de IP encendió las alarmas entre los defensores de la privacidad, ya que Proton nació como una empresa “centrada en la privacidad del usuario”.
La Unión Europea quiere romper los cifrados
Legisladores de la Unión Europea indicaron, anteriormente, que quieren encontrar formas de permitir el acceso legal a los datos cifrados. Esto pasaría, incluso, sobre el cifrado fuerte.
Tanto ProtonMail como otros servicios cifrados de extremo a extremo advirtieron en enero de este año que los legisladores “corren el riesgo de poner a la región en un camino peligroso hacia el cifrado de puerta trasera, si continúan en esta dirección”.