Luego de grandes momentos de tensión y emociones extremas por fin la primera misión tripulada de Blue Origin ha concluido resultando en un absoluto éxito para la compañía espacial y su tripulación.
Los preparativos para este vuelo fueron extensos y esto llevó indirectamente a que Virgin Galactic con Richard Branson se adelantaran un poco logrando algunas semanas antes un vuelo espacial suborbital.
Así que la meta era clara: sobrevivir, hacer historia con esta tripulación que incluía a Jeff Bezos y llegar mucho más arriba que sus competidores. Muchas cosas podrían haber salido mal. Pero no, lo lograron. La misión fue un éxito.
Blue Origin llega más alto
Las condiciones meteorológicas eran el mayor factor de incertidumbre para el vuelo tripulado de esta misión. Desde el inicio de la transmisión en vivo se dejó en claro eso. Por fortuna fue posible cumplir con el itinerario de todo con un ligero desfase de minutos.
Efectivamente todo duró poco más de 11 minutos y la misión transcurrió sin incidentes en las dos etapas más críticas: el regreso del cohete propulsor New Shepard y el aterrizaje de la cápsula que contenía la tripulación.
Ambos objetivos se lograron sin incidentes. La nave logró elevarse por encima de los 351.027 pies, lo que equivale a 106.99 kilómetros. Una altura muy encima de los 85 kilómetros de Richard Branson con Virgin Galactic.
La tripulación de este vuelo se conformó por Wally Funk, de 82 años, quien se formó como astronauta en la década de 1960 como parte del proyecto semioficial femenino Mercury 13. Una «invitada de honor» derivada de aquella vieja política de la NASA que dictaba que solo los hombres podían volar.
El menos experimentado de la tripulación fue Oliver Daemen, de Holanda, quien con 18 años de edad quien ahora se ha convertido en el astronauta más joven de la historia.
El otro miembro del equipo es el hermano de Bezos, Mark, con 50 años de edad, inversor, fundador de una agencia de marketing y ex bombero voluntario.
Jeff Bezos no necesita presentación y buen parte del aterrizaje se centró en él. Pero la tripulación en conjunto resulta un fragmento interesante de la historia de la exploración espacial moderna.
Este es un gran logro, para el resto de 2021 Blue Origin tiene programado un par más de vuelos. La meta máxima sigue firme: llegar a la Luna.
