Rusia anunció que podría retirarse de la Estación Espacial Internacional en 2025, ya que en sus instalaciones puede haber un “desastre” que arriesgaría la vida de la tripulación.
El país está trabajando en el primer módulo de una nueva estación, que entraría en órbita a principios de 2025.
Yuri Borisov, viceprimer ministro ruso, señaló que el paso del tiempo está afectando a la Estación Espacial Internacional. Para 2025, la ISS (por sus siglas en inglés) cumplirá 27 años, y fue diseñado originalmente para durar entre 15 y 30.
“No podemos poner en peligro la vida de la tripulación”, indicó Borisov, citado por Roscosmos (la Agencia Espacial Federal de Rusia). “La situación, que hoy está ligada al envejecimiento de las estructuras y al hierro, podría desencadenar en consecuencias irreversibles e incluso, un desastre. Esto debe prevenirse”.
Mientras, Dmitry Rogozin, jefe de la agencia espacial rusa, apuntó que “el primer módulo central de la nueva estación orbital rusa está en marcha”.
Las diferencias entre la Estación Espacial Internacional y la futura estación de Rusia
La Estación Espacial Internacional tiene módulos presurizados para rusos, estadounidenses, japoneses y europeos. En total son 16, en los que los astronautas y cosmonautas pueden habitar.
Lanzada en 1998 desde Cabo Cañaveral, tiene 73 metros de longitud con un ancho de 109 metros, pesando 419 toneladas. Su volumen presurizado es de 915.6 metros cúbicos.
Actualmente tiene siete tripulantes, formando parte de la expedición número 65. Son los norteamericanos Shannon Walker, Michael Hopkins, Víctor Glover y Mark Vande Hei; los rusos Oleg Novitsky, Pyotr Dubrov y el japonés Soichi Noguchi.
Se encuentra a 400 kilómetros sobre la Tierra, y recibe tripulaciones rotativas desde noviembre del 2000.
Su objetivo es servir de laboratorio para la investigación del espacio, con un costo de fabricación de 150 mil millones de dólares. El valor de operación de la ISS es de 4 mil millones de dólares anuales, lo que preocupa a la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
Según Roscosmos, su nueva estación internacional contaría con cinco módulos, entre ellos uno comercial para recibir a cuatro turistas. Se basará en la antigua estación espacial Mir, creada por la Unión Soviética y luego manejada por Rusia (1986-2001).
Su ubicación estaría en la órbita terrestre baja, similar a la de la actual Estación Espacial Internacional, pero de menor tamaño.
La propuesta de cooperación futura de Rusia tendría cercanía con la Administración Espacial Nacional de China, alejándose gradualmente de la NASA.