EL LG Velvet llegó tarde, pero lo hizo, y pudimos apreciar la extraña propuesta de la firma surcoreana en esta entrega.
Estas son las especificaciones técnicas de la versión que llega a nuestra región:
- Pantalla de 6.8 pulgadas 20.5:9 FHD+ P-OLED
- Procesador Qualcomm Snapdragon 845
- 6 GB de RAM
- 128 GB de almacenamiento ampliable vía microSDCámara:
- Cámaras: 48MP Standard + 8MP Wide + 5MP Depth
- Frontal: 16MP
- Batería de 4,300mAh
Lo primero que salta a la vista, y que evidentemente es la propuesta de valor por parte de LG es el diseño. Es un equipo con cámaras que no sobresalen, a excepción de la principal, que lo hace ínfimamente. Todas están ordenadas por porte y LG apuesta por no poner un módulo gigantesco y protagonista, como es la tendencia.
Con pantalla curva y posterior curvo, es extremadamente simétrico, además de ser muy delgado y ligero, al punto que llega a asustar no sentirlo en el bolsillo; estoy terriblemente acostumbrado a llevar celulares más sustanciales.
A pesar de tener un notch, que quizás no es la alternativa más atractiva, se siente como un panel bien logrado, con brillo «ok» y un tratamiento del color que se puede acomodar a tu gusto.
La inclusión de un puerto de audífonos, sin dejar de lado la resistencia al agua y al polvo con certificación IP68 es algo extraño y muy bienvenido. Ahora bien, removieron el DAC por lo que ya no es la para «audiófilos» que era antes.
Ya desconectado, tener parlantes dobles estéreo y un ratio de 20:5:9, a pesar de ser «solo» FullHD, hace que jugar sea y consumir contenido multimedia sea súper agradable.
El lector de huellas está bajo la pantalla y a pesar de no ser el mejor del mercado, cumple bien. Se dan muchos «nice to have» en un teléfono que no es necesariamente premium, de hecho cuesta la mitad o un tercio que esos.
Su rendimiento es bueno: en esta región, en vez de darnos un procesador Snapdragon de la serie 700 con 5G, se nos da uno de gama alta, pero de hace dos años, es el mismo que tiene el Galaxy S9, por ejemplo. Es una decisión extraña, sin duda, pero que me gusta. Sucede que a pesar de ser un chip «antiguo», sigue teniendo la potencia de un equipo caro actual, no es que Qualcomm haya avanzado mucho en materia de potencia.
Dado lo anterior, sin ser la experiencia más rápida del mundo, es igual o mejor que un gama media alta de hoy en día, pero con todos los extras que le dan mucho valor agregado. Si tiene hasta carga inalámbrica, pues, y la batería da unas 6 a 7 horas de pantalla encendida.
En Chile, esta variante del equipo se puede encontrar a CLP $499.990, pero ojo, que si eres busquilla se puede encontrar a mucho menos, y ahí es extremadamente recomendable. Es «casi» un gama alta premium, es una propuesta súper extraña, pero que cumple súper bien para los que buscan un diseño atractivo y todos los lujos de los terminales que cuestan el doble.