El domingo 22 de mayo de 1960 a las 15:11 horas de la tarde se produjo el terremoto más fuerte registrado en la historia de la humanidad, un violento sismo el cual alcanzó la magnitud de 9.5 en la escala Richter, dejando una total destrucción en toda la zona centro y sur de nuestro país.
El megaterremoto de Valdivia, como comúnmente se le conoce, tuvo su epicentro en la zona cercana a Traiguén, ubicado en la Provincia de Malleco en la Región de la Araucanía, siendo de tal magnitud que la percepción y consecuencias de este sismo fueron a nivel planetario, alcanzando los grados de XII y XIV en la escala de Mercalli.
Además del terrible terremoto, se registraron una serie de tsunamis en la costa, cuyo alcance fue en gran parte del territorio nacional como también su extensión hacia el resto del Océano Pacífico, afectando lugares tan distantes como Japón y Hawái.
El total de victimas que dejó este gigantesco desastre natural fue alrededor de 2.190 personas, además de provocar 2 millones de damnificados en el país, sumado a cuantiosos daños a la infraestructura y la destrucción total de varias localidades.
Terremoto infernal
El terremoto de Valdivia fue precedido por dos grandes sismos ocurridos en días anteriores. El primero se registró la mañana del sábado 21 de mayo, cuando un fuerte movimiento telúrico de magnitud 7.5 richter afectó la costa de la Península de Arauco, teniendo una percepción Mercalli de grado X, afectando principalmente a las ciudades de Concepción y Talcahuano entre otras localidades.
El segundo sismo ocurrió la mañana del día siguiente, en específico a las 6:33 minutos de la mañana del 22 de mayo a la misma zona, destruyendo gran parte de la edificación que había quedado dañada con el del día anterior.
En este sismo no se registraron víctimas fatales pero fue percibido en gran parte del territorio nacional dejando con problemas telefónicos a gran parte del país. Más tarde ese mismo día, otro fuerte sismo afectó la zona prácticamente dejando inertes a todos los habitantes del sur del país quienes desesperados no entendían que pasaba.
¿Terremoto o cataclismo?
Sin embargo, lo peor estaba por venir. El domingo 22 de mayo a las 15:11 horas de la tarde comenzó a producirse una ruptura tectónica sin precedentes, la cual nunca antes había sido registrada en la historia del país.
El epicentro de este megaterremoto comenzó a producirse en las cercanías de Temuco expandiéndose hacía el sur abarcando un largo total de fractura de casi 1000 kilómetros de largo. Este masivo evento provocó una ruptura total que abarcó desde la Península de Arauco por el norte hasta la Península del Taitao por en el sur.
Para los geólogos y expertos del país, este evento gigantesco fue una sucesión de 37 o más terremotos cuyos epicentros se registraron a lo largo de 1.350 km seguidos los cuales alcanzaron un pick de 9.5 grados en la escala de Richter, causando la total destrucción en gran parte del territorio chileno desde el norte de la cuidad de Talca hasta la zona sur de la Isla de Chiloé.
La zona que resultó más afectada fue la ciudad de Valdivia y sus cercanías, donde la intensidad fue tan grande que el sismo alcanzó hasta XIV grados en la escala de percepción de Mercalli. Toda la ciudad resultó destruida y el Rio Calle Calle inundó gran parte de la comuna.
Un infierno sin fin
El terremoto tuvo una duración total de 14 minutos, de los cuales durante 10 no se detuvo nunca de temblar, causando el total pánico y desconsuelo de la mayoría de las personas que vivieron este cataclismo en las zonas afectadas.
Fueron un conjunto de tres de olas las cuales afectaron la costa del país, siendo la última con una altura mayor a los 10 metros, la cual se dedicó destruir por completo todas las localidades de la costa cercanas al epicentro. Luego del gran sismo, una onda expansiva a través del mar comenzó a recorrer todo el Océano Pacífico.
Casi 15 horas después, un gran tsunami de más de 10 metros de altura se registró en la ciudad de Hilo en Hawái, provocando la muerte de más de 60 personas. Fue tal la potencia que incluso la onda expansiva llegó hasta Japón causando un maremoto por la zona dejando también en una gran cantidad de víctimas.
Otro gran desastre consecuencia del terremoto fue el evento conocido como el Riñihuazo, donde los derrumbes de diversas montañas bloquearon el desagüe del lago Riñihue, el cual estuvo a punto de rebalsarse. Sin embargo, esto fue detenido gracias a un trabajo en conjunto entre obreros y militares quienes trabajaron duro para poder evitar este potencial desastre en la zona.
Para nunca olvidar
Este tipo de sismos, según señalan los expertos, ocurren cada 500 o 600 años, siendo denominados como megaterremotos los cuales suelen ser tan potentes que generan consecuencias a nivel mundial, tal como ocurrió con el de Valdivia.
Chile es el país más sísmico del mundo y estaremos siempre expuestos a este tipo de eventos naturales, pero el gran terremoto de Valdivia marcó un antes y un después en lo que respecta al registro y conocimiento que se tenía con respecto a estos eventos.
Sin duda cada 22 de mayo es una fecha triste para el país, ya que se conmemora otro aniversario más de este cataclismo natural sin precedentes en la historia de la humanidad.
Aunque durante el último tiempo se hayan registrado varios terremotos, en especial en la última década, no ha existido uno tan potente y destructivo como el gran terremoto de Valdivia, y esperemos que aún quede mucho tiempo para que vuelva a producirse otro de similares características.
