Twitter se ha convertido en un lugar un tanto hostil, entre tantas noticias falsas y bots. Dentro de todo parecía que el mayor punto de seguridad y confianza eran los propios administradores de la plataforma. Pero parece que no es así.
Según un preocupante artículo de los colegas de TechCrunch, Karan Saini, un investigador en materia de seguridad digital; logró comprobar que Twitter almacenó todos sus mensajes directos eliminados.
Luego de descargar una copia de seguridad de sus datos en la plataforma, dio con un «bug funcional», como él lo llama.
Dicha falla, permitiría que los usuarios tengan acceso a sus mensajes borrados. Incluso si las cuentas han sido eliminadas y suspendidas.
Este bug no expondría la privacidad de los usuarios. En el sentido de que esos datos sólo podrían ser accedidos por parte del emisor o el receptor del mensaje borrado.
Sin embargo comprueba que Twitter está guardando una copia de toda la información alguna vez publicada mediante la red social. Incluso las conversaciones privadas.
El bug de hecho habría sido parchado a finales del año pasado. Luego de ser descubierto mucho tiempo antes.
Hasta ahora se ha vuelto público el problema. No como una amenaza de seguridad. Sino como una exhibición de lo que Twitter hace sin mucha transparencia.