Hace unos días escribimos sobre la sonda «Parker Solar«, cuya misión será la de estudiar el sol a una distancia nunca antes alcanzada por algún objeto fabricado por el hombre. El objetivo de la NASA con este objeto es estudiar nuestra estrella y entender más a fondo sobre sus propiedades. Su despegue estaba programado para la madrugada del sábado 11 de agosto. No obstante, debido a problemas técnicos, tuvieron posponer la misión.
Ya estaba todo preparado para el lanzamiento. Minutos faltaban para que el cohete hiciera ignición y se dirigiera con gran velocidad hacia la estratosfera. Faltando dos minutos sonó una alarma que anunciaba problemas en el sistema de helio gaseoso, aparentemente por una presión irregular. Ante tal peligro no hubo otra opción que suspender la operación.
Con este ya son tres lanzamientos suspendidos en la base de Cabo Cañaveral. Sin embargo, con un 60% de probabilidad de condiciones meteorológicas favorables, se volverá a intentar el despegue mañana. El cohete Delta IV de la compañía United Launch Alliance nuevamente está programado para partir a las 3:31 am EDT, como confirmó la NASA. Esta es exactamente la misma hora para Chile, mientras que para México y Colombia es a las 2:21 am.
¿Por qué es tan importante esta misión?
Si Parker tiene un lanzamiento exitoso mañana, podrá estudiar al sol desde muy cerca. Exactamente estará a unos 6 millones de kilómetros, lo cual es suficiente para que la sonda experimente temperaturas de hasta 1400 °C. Gracias a su escudo térmico de carbón de 12 centímetros de grosor, su interior no sentirá las altas temperaturas.
Desde ese punto Parker Solar podrá resolver algunos enigmas que actualmente existen sobre nuestra estrella. Entre ellos el proceso de cómo se produce el viento solar que llega hasta nuestro planeta, o por qué la temperatura de su superficie alcanza los 6.000 °C mientras que su corona puede alcanzar los 2’000.000 °C.
Esperemos que todo salga bien en el próximo intento que habrá el domingo.