Cuando MoviePass lanzó su servicio hace meses se creó gran expectativa. El servicio, como una respuesta directa a Netflix, que busca mantener a las audiencias visitando salas, ofrece a sus suscriptores la posibilidad de ir al cine las veces que quieran por una suscripción mensual de USD $7,95.
Hasta aquí todo parecía una auténtica ganga. Pero resulta que nada era tan inocente como aparentaba. Y la cloaca quedó expuesta a raíz de un descuido casi involuntariamente cómico.
Sucede que el CEO de MoviePass, Mitch Lowe, acudió a dar una charla en el Entertainment Finance Forum 2018 de Los Ángeles, en donde dijo algo que alarmó a todos. Cuando hablaba en tono casual sobre las cualidades de su servicio y cómo perfilan a sus clientes:
Esas palabras alertaron sobre el grado de intrusión a la privacidad de sus usuarios que podría tener la plataforma. Y para empeorar la situación terminaron confirmando que todo lo que dijo su CEO es cierto.
En declaraciones obtenidas por los colegas de The Verge, un portavoz oficial de MoviePass constató las palabras de Lowe, aunque intentó matizarlas y calmar la incertidumbre. Afirmando que no harán nada nocivo con los datos recolectados:
Así que ahí lo tienen. En general MoviePass no se retracta de nada. Confirma la recopilación y uso de datos de ubicación de sus suscriptores. Pero no los venderá a terceros y todo será por el bien de sus clientes.
¿Eso calmará a todos?
