Esta semana se inauguró en el parque Mundo Aventura de Bogotá la primera montaña rusa que integra realidad virtual en Sudamérica. Su nombre es Quantum, y es un proyecto realizado netamente por manos colombianas.
La idea nació de la inspiración al ver hace dos años la primera montaña con estas características en el mundo, ubicada en Six Flags en Atlanta, EEUU. Desde ese entonces se emprendió un sueño que comenzó inmediatamente con la investigación de cómo replicar esa tecnología en el país.
El proyecto gira en torno a una temática de ciencia ficción. Las instalaciones están llenas de pantallas que invitan a ser parte de una misión militar en el espacio exterior cuyo resultado podría definir el futuro de la raza humana. Cuando el usuario toma asiento justo antes de comenzar la experiencia, le ponen una gafas de realidad virtual que lo sitúan en el interior de una nave espacial.
Es entonces cuando la nave de combate del que vive la simulación es eyectada y aparece ante él un enfrentamiento que recuerda a Star Wars: lleno de rayos láser, explosiones y naves gigantes que surcan el espacio. Se vive una experiencia muy emocionante y frenética.
Uno de los líderes del proyecto, Juan Carlos Rosas, comentó el por qué de la temática: «La ciencia ficción siempre ha basado sus desarrollos en los temas espaciales de extraterrestres donde siempre hay un héroe, un villano y un espacio tan grande como la imaginación».
Para él y su equipo, hacer este proyecto realidad no fue nada sencillo. «Lo más complicado de esto fue la realidad virtual puesto que está en su pleno auge. Para desarrollarlo tuvimos que levantar los planos estructurales de la atracción, llevarlos a un motor de render para poder modelar los espacios 360º y a partir de eso generar una experiencia que se sincroniza con los movimientos de la atracción. Eso en términos prácticos suena sencillo, pero es muy complicado porque de esa sincronización está el éxito del proyecto».
2.200 millones de pesos (750 mil dólares) fue la inversión del parque Mundo Aventura y se espera que la nueva montaña rusa aumente al menos en un 7% el número de visitantes.