El FBI y las autoridades de Estados Unidos no han quitado el dedo del reglón sobre sus sospechas contra la seguridad de los programas de Kaspersky y sus nexos con los rusos, que usarían la plataforma de esta compañía como una vía de espionaje.
Ahora, en un golpe fuerte que formaliza la abierta desconfianza contra esta compañía, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés), ha lanzado una orden oficial en donde prohíbe el uso de cualquier programa de Kaspersky en oficinas de gobierno:
Es así como la orden otorga un plazo de 30 días para identificar cualquier sistema gubernamental que utilice programas de Kaspersky, marcando un lapso de 60 días para elaborar un plan de eliminación de ese software, y una fecha límite de 90 días en total para desinstalar completamente cualquier sistema de esa compañía en oficinas de gobierno.
Hasta la fecha Eugene Kaspersky, dueño y amo de la plataforma de seguridad alega su inocencia, y como muestra de ello ha llegado incluso al grado de volver gratuito su antivirus y hasta se han planteado abrir el código fuente de todo para comprobar la pureza de su software.
¿Le creemos?