A tres meses del estreno exclusivo en Netflix de The Get Down, la serie producida y dirigida por el excéntrico Baz Luhrmann (Moulin Rouge), se vendría comprobando que fue un fracaso absoluto con la audiencia de esta plataforma de entretenimiento, convirtiéndose en el primer producto original que falla dentro del servicio.
De acuerdo con un reporte de la firma Symphony Advanced Media (via Variety), durante sus primeros 31 días de exhibición The Get Down habría tenido una audiencia total de 3,2 millones de suscriptores en Netflix, una cifra casi promedio para series de TV por cable, pero que palidece radicalmente ante los 13,23 millones de espectadores logrados por Stranger Things durante el mismo lapso de tiempo.
El punto radical que marca el fracaso vendría por parte de los informantes de Deadline, quienes han revelado los verdaderos costos de producción de esta serie. Ya que afirman que cada uno de los 12 episodios de The Get Down habría exigido una inversión de más de USD $16 millones, ofreciendo como comparativa el caso de Game of Thrones, donde cada capítulo ronda apenas los USD $10 millones, con mejores números de audiencia.
Existe un largo número de reportajes donde se documentan los problemas y excesos detonados por Luhrmann, en su intención de incursionar en un formato que no domina y parece que Netflix habrá de pagar los platos rotos.
Por fortuna la tendencia es clara: los suscriptores de esta plataforma están enganchados con las producciones originales de Netflix. El factor crucial sería entonces apostar por una propuesta realmente atractiva, más allá de la intervención de algún cineasta reconocido.
Las nuevas tecnologías de entretenimiento tienen algunas lecciones por aprender todavía.
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