Opera es el navegador web que todos conocen, y casi nadie usa. Se lanzó como una alternativa a los navegadores de esa época, pero de paga. Fue en el año 2000 que dejó ese modelo de trialware para pasar a un modelo de publicidad, hasta el 2005 que eliminó anuncios para depender de Google, en un modelo similar al que tiene hoy Firefox con Yahoo.
A pesar de ser uno de los más grandes innovadores en cuanto a funciones, mismas que implementaron tiempo después Firefox y Chrome, no goza de gran participación de mercado.
Ahora, con información de Reuters, Opera Software está considerando vender la compañía debido a que tuvieron ingresos más bajos de lo esperado durante el segundo cuarto de este año, que se suma a la baja en el crecimiento que tuvieron de acuerdo a sus resultados del pasado febrero. Esto los está obligando a bajar sus expectativas para lo que resta del año. Parte de la culpa de estos resultados, fue debido a un desempeño inferior en la publicidad móvil, en donde Opera es una de las mejores opciones para navegar en smartphones o tabletas.
Para asesorarse en la venta, o algún tipo de asociación, Opera Software está trabajando con Morgan Stanley y ABG Sundal Collier. La decisión final, la tomarán al finalizar la segunda mitad del 2015.
Es probable que Opera tenga un nuevo dueño para el 2016, aunque no se ha revelado algún posible comprador. Lo único que realmente espero, es que Opera continúe existiendo como una de las mejores opciones para navegar por Internet, por mucho más tiempo. Aunque siempre podemos voltear a ver a Vivaldi, el navegador del fundador de Opera, que para muchos es su verdadero sucesor.