Esta noticia parece sacada de una comedia hollywoodense de los 80, pero ocurrió hace sólo unos días en Suecia, mientras se celebraba la conferencia “Folk och Försvar” (“Gente y defensa”) en el Hotel Sälens, la cual es considerada como la más importante del país y a la que asisten ministros, encargados de vigilancia y todas las autoridades más relevantes en materia de seguridad nacional.
En esta ocasión, el Partido Pirata Sueco también decidió asistir y no encontró nada mejor que poner una red Wi-Fi abierta, nombrarla “Red para invitados” y vigilar todo lo que los asistentes a la charla hacían en Internet.
Lo chistoso de todo esto es que, además de espiar todo lo que veían las cerca de 100 personas que cayeron en la trampa, también se elaboraron perfiles personalizados con base en la conducta de navegación de los usuarios. Gustav Nipe, uno de los creadores de esta hazaña, se refirió a cómo el grupo recolectó los datos en un tabloide web del país.
Si lo anterior no fuera poco, también se sacaron conclusiones de algunos hábitos de navegación de los encargados de seguridad del país, los cuales dejan bastante que desear.
Felizmente el partido también anunció ―en un evidente tono de broma― que no encontró signo alguno de preparación o planeación de eventuales ataques terroristas dentro de su búsqueda, pero sí demostró su preocupación ante las acciones de sus representantes, por lo que llamó a la gente a informarse respecto a la navegación segura.