Hace casi treinta años que la policía enseñó a los perros una técnica para identificar narcóticos y bombas por medio del olfato, de modo que fueran elementos clave a la hora de hacer arrestos. Con la llegada de la era digital muchos vicios y delitos surgieron y uno de ellos es el de la pornografía infantil, por lo que los perros han tenido que aprender un nuevo truco: detectar si escondes un electrónico entre tus pertenencias.
Selma es la primera perra capaz de detectar un químico que se incluye en dispositivos electrónicos como notebooks, discos duros o memorias USB. Del mismo modo puede saber si ese químico ha estado en contacto con tus manos o se encuentra escondido dentro de cajas metálicas o bloques de concreto, lo que ha ayudado a la policía de Connecticut y al FBI en la investigación de casos de pornografía infantil.
La perra ha sido entrenada por Jack Huball, un veterano de ciencias forenses que entrenó por olfato al primer perro que ayudó en un caso de incendio provocado en 1986, iniciando así la participación canina en los cuerpos policiales. Huball identificó los químicos usados en los dispositivos de almacenamiento y entrenó a Selma en la detección de uno en particular.
Selma ha participado en más de cincuenta órdenes de cateo desde octubre del 2013 y su labor ha ayudado a arrestar a varios sospechosos encontrado tarjetas de memoria escondidas y detectando documentos fraudulentos. El siguiente paso será entrenarla para olfatear componentes de las pantallas LCD de modo que pueda detectar teléfonos celulares escondidos.