En la gran G se están preparando para una verdadera era robótica y desde hace unos años ya han demostrado su interés por salir de la Internet y enfocarse en productos wearables y de uso cotidiano, desde Glass hasta los automóviles que se manejan solos.
Con la compra de DeepMind, Google se enfocará aún más en el desarrollo de algoritmos para automatizar el aprendizaje robótico implicando la neurociencia a partir de técnicas específicas. En un ejemplo más claro, desarrollarían robots que pudieran aprender constantemente, cerca de parecerse mucho al aprendizaje de un ser humano.
Las aspiraciones de Google por acaparar la atención sobre las adquisiciones que comenzaron hace unos meses, como lo fue con Boston Dynamics, una de las más reconocidas y de las que se había hablado hasta ahora que se supo de esta noticia, se han llevado a cabo con gran satisfacción. La compra de DeepMind es un boom, pues hablamos de “llevar” el algoritmo de Google de la Internet a la vida real, quizás en la próxima década.
Pero no sólo en Mountain View estaban interesados por su adquisición, pues Facebook ya había estado en pláticas para que el equipo de DeepMind formara parte de la mayor red social del mundo, aunque no está claro por qué no se concretó un acuerdo y para qué lo solicitaba. Sin embargo, Google ha pagado más de USD $500 millones por la startup londinense, pero además ha creado un comité de ética para comprometerse a no abusar de las tecnologías de Inteligencia Artificial.
Deberíamos estar preparados para los acontecimientos que están por suceder dentro de Google y que pasarán a formar parte de nuestra vida en el futuro, y no es de locos creer que esto sucederá pronto, por sólo recordar la adquisición de Nest. Imaginemos que los robots llegarán para quedarse, pero no para reemplazar al ser humano o con fines bélicos, ya que eso sería verdaderamente catastrófico sociológicamente hablando.
Link: The Verge
