Un proyecto entre la Universidad de Oxford y el Museo de Zoología de Lausana en Suiza busca probar la existencia del legendario Pie Grande, para ello se realizarán pruebas genéticas en restos orgánicos que algunos dicen, pertenecieron a la criatura.
Uno de los argumentos para llevar a cabo estas pruebas es que antes, los exámenes hechos a estos supuestos restos dejados por el Eslabón Perdido no fueron muy precisos o que las muestras coincidían con restos humanos pero, hoy se cuenta con la tecnología que da mayor certeza en los resultados.
Las muestras se tomarán de un archivo recopilado por Bernard Heuvelmans, quien investigó los avistamientos desde 1950 hasta su muerte en el 2001.
En 1951 una expedición al Everest supuestamente encontró evidencias de la existencia de Pie Grande y desde entonces, muchos han afirmado haber tenido algún tipo de contacto o por lo menos haberlo visto entre las sombras.
No se sabe si la prueba tenga éxito, al final los resultados pueden ser inconclusos o se pueden topar de nuevo con restos de humanos o de animales, pero no hay forma de saberlo hasta no intentarlo.
Link: Científicos usan genética en busca de Pie Grande (Azteca Noticias)