Esta es la historia: una mujer en Illinois quería operarse la cara, buscó doctores en internet y se operó. La cirugía no salió como ella quería y quedó con “bultos en la cara”, por lo que dejó un comentario negativo en la página donde encontró a los doctores. Ahora, ellos (sin identificarse) están demandando a Google por US$ 50 millones por daños a su reputación.
De lo poco que se puede entender de la demanda, ellos dicen que perdieron dinero y sufrieron vergüenza luego de que Google se negara a bajar los comentarios que según ellos son falsos y difamatorios. Ellos hablan de “blogs” y un sistema para “dar supuestos ratings a negocios”, por lo que se entiende que están hablando de Google Places, una herramienta para encontrar y posteriormente evaluar a negocios locales.
Los doctores también enviaron evidencia sellada (que no se puede ver) que incluye los comentarios donde los pacientes los acusan de errar en cirugías y, además, de dejar comentarios positivos falsos sobre su trabajo.
¿Por qué no entregan sus nombres? Probablemente porque no quieren llevar más atención sobre su trabajo, por lo que una demanda “anónima” podría funcionar mejor. De cualquier forma, este no es el primer caso de este tipo y si fuera por el historial, los doctores no tienen muchas opciones de ganarle a Google, quienes no quisieron hacer comentarios sobre el caso.
Link: Chicago Doctors Sue Google Over Negative Online Reviews (paidContent)
