Ahora fue la operadora Sprint, competencia directa pero más pequeña de AT&T y T-Mobile, quien aportó con su granito de arena para echar abajo la unión, estableciendo una demanda legal en el Distrito de Columbia argumentando que de aprobarse la proposición, se estaría «dañando a los consumidores, los clientes corporativos y las operadoras», entre las cuales por supuesto se encuentra Sprint y su temor de quedar como un participante demasiado pequeño dentro de una industria que sería dominada por la fusión AT&T + T-Mobile en contra de Verizon, la otra protagonista del mercado norteamericano.
¿Y qué dijo el otro? Un vocero de AT&T respondió de la siguiente forma frente a la noticia de la demanda por parte de Sprint:
Con estas palabras, la empresa sigue insistiendo en que la reducción de los participantes en la industria de lss operadoras «beneficiará a los clientes», algo que quizás se contrapone a la afirmación que también se deduce de esta declaración: el hecho de que la fusión en sí es una amenaza para las otras operadoras, ya que es necesario «que se protejan a sí mismas» frente al hecho, lo cual AT&T no niega como forzoso e identifica en el actuar de Sprint. De ser así, entonces esta «amenaza» podría afectar a Sprint tanto como para que tengan que retirarse de Estados Unidos, reduciendo la competencia en dicho país y por supuesto, afectando a los clientes, contrario a lo que piensa AT&T.
Links:
– Sprint files suit to stop AT&T / T-Mobile merger (Engadget)
– AT&T fires back against Sprint over T-Mobile acquisition suit (Engadget)