Recordarán que hace unos días presumíamos de haber estado en la presentación de las nuevas cámaras digitales de Lumix, desde El Calafate. El motivo de estar presentes en tan exótico lugar, era el poder probarlas en los espectaculares paisajes y dar un veredicto. El modelo que me tocó, o más bien elegí, fue la LUMIX DMC-FT3 o DMC-TS3. Se trata del equipo a prueba de casi todo. Las especificaciones dan miedo; presume de soportar hasta 12 metros bajo el agua, resistir caidas de hasta 2 metros de altura y al congelamiento de hasta -10ºC.
Aparte de lo anterior, tiene un sensor CCD de 12,1 megapixeles, lente Leica DC Vario-Elmar de 28mm con acercamiento de 4,6x y zoom inteligente de 6x. Capacidad para grabar video FullHD en formato AVCHD, además de GPS, brújula, altímetro y barómetro. El compañero ideal para al aventurero. Pero ¿cómo se comporta en la vida real tomando fotos arriba de un glaciar?
En estado Beta
Para empezar tenemos que aclarar algo muy importante y que definitivamente podría afectar la opinión final: se trata de un producto todavía en estado de prueba, por lo que muchas de las funciones no están activadas o funcionan a la mitad. Por eso mismo este texto no puede ser una reseña, sino solo una primera vista. Por ejemplo; el GPS funcionó menos de la mitad del tiempo y la brújula, altímetro y barómetro ni siquiera aparecían en el sencillo menú, una pena que demerita lo que podemos decir de este equipo. Por el lado positivo, nos encontramos con una cámara que logra captar fotografías de altísima calidad y resistente a caídas y al agua, como lo pudimos comprobar en un accidente que tuvimos en el glaciar Perito Moreno.
Este es el glaciar Perito Moreno, la foto fue tomada con la LUMIX DMC-FT3
La construcción es de lo más sobresaliente; sus materiales en aluminio y plásticos están muy bien ensamblados y se sienten firmes al tacto. No hay pequeñas piezas que denoten debilidad, sino todo lo contrario. El diseño que nos tocó luce en un sobrío color plata, aunque también estaba disponible en colores más llamativos como en azul y rojo; de cualquier forma es un equipo elegante y resistente.
A prueba de todo
La parte superior cuenta con tres botones: el de encendido, el de los modos de captura y el de grabación de video. Esto nos ocasionó que en repetidas ocasiones terminaramos apagando el equipo, en lugar de disparar ya que al tacto se sienten muy parecido, algo de textura hubiera sido deseable. De un lado se esconde la batería y la ranura para colocarle tarjetas SD. La parte trasera tiene botones para ajustar el zoom, borrado de las fotos o video, menu, ajuste de flash y navegación por las opciones del menú.
Hablando del menú, este es demasíado sencillo y carente de algunas opciones importantes como la ya mencionada del barómetro. Pero es porque se trata de un producto todavía en producción. Así como está, tiene las opciones básicas como el tamaño de la fotografía, el tipo de imagen (normal, vivido, blanco y negro, sepia), ajuste del ISO, y algunos parámetros para el video. La opción para el GPS no funcionaba, salvo para encenderlo y apagarlo.
En cuanto a la resistencia, fuimos testigos de como una cámara de este tipo caía de las manos de su dueña, estrellarse contra el hielo glaciar y deslizarse por una hendidura por donde corría agua. La dimos por perdida, pero un rescatista la sacó de su atoramiento y el equipo siguió sacando fotos como si se hubiera dado una ducha para refrescarse. Estoy seguro que si aguantó esto, podrá aguantar cuando a la abuelita se le caiga de sus manos al piso de la cocina.
Lo interesante está en las fotos
A pesar de contar con un producto no terminado en las manos, donde no hubo queja fue en el apartado de las fotografías. Éstas lucieron brillantes, respetando los colores y sin artefactos extraños, incluso con luz directa. Las fotos las pueden apreciar en la galería que adorna este post. Si esta calidad se mantiene y le agregan todas las funciones que prometen, estamos ante un equipo ganador que mantendrá contentos a los fotógrafos aventureros, distraídos o sencillamente a quienes aprecien las fotos bonitas y no deseen un gran zoom.
Foto capturada con la LUMIX DMC-FT3
En cuanto a la grabación de los videos, estos son buenos sin llegar a ser sobresalientes. El modo Intelligent Auto (iA) ajusta automáticamente los parámetros para tomar la mejor imagen posible sin preocuparnos por complicadas configuraciones, algo que agradecerán los que solo gustan de apuntar y grabar. Para muestra, un borrego botón:
Conclusión
Esta LUMIX nos gustó por las excelentes fotografías que captura. Nos hubiera encantado probar el resto de las funciones que promete y un zoom más poderoso. Pero su cualidad de resistencia se puso a prueba y pasó con creces. Panasonic todavía no ha dado fecha de salida y mucho menos precio para el mercado Latinoaméricano, pero es un hecho que llegará. Cuando eso pase, considerenla entre sus próximas compras, sobre todo si les gustan los deportes extremos o tienen manos de mantequilla.
Lo imperdible:
- La calidad de las imágenes son muy buenas.
- Resistente a caidas y al correr del agua helada.
- Excelente construcción.
Lo impresentable:
- No pudimos probar características importantes como el barómetro, altímetro y la brújula.
- Las opciones disponibles son muy pocas para los fotógrafos que buscan personalizar cada toma.
- El zoom es muy corto si consideramos que se trata de una cámara para campo abierto.
