Jeff Bezos (cc) ptufts
Después de la tempestad que provocó la decisión de Amazon de borrar libros desde los Kindle de sus usuarios, el mismísimo Jeff Bezos comprendió el tamaño y las repercusiones de la cagada (no merece otra palabra) que se habían mandado al invadir la privacidad de los mismos usuarios que confiaron en ellos al comprar un Kindle.
Para los que no saben de qué hablamos, hagamos un breve repaso. Este episodio se produjo la semana pasada cuando los usuarios que habían adquirido “1984” y “Animal Farm” (Rebelión en la granja), ambos de George Orwell, vieron cómo sus productos, literalmente, desaparecían de sus lectores electrónicos. Las quejas llegaron al foro de Amazon, donde cientos de consumidores alegaron por este robo.
Para explicar el enredo, la compañía explicó que ambos libros habían sido publicados por una empresa que no contaba con los derechos necesarios. Después del dueño real de los derechos, la tienda virtual procedió a retirarlos directamente de los Kindle de sus clientes, devolviendo el dinero, pero dejando a los consumidores con un sentimiento de que habían sido invadidos en su privacidad.
Volvamos al presente. Para tratar de arreglar en algo la pésima imagen ofrecida, Bezos sacó el látigo y empezó a castigarse en la plaza pública por la decisión tomada. Además, se deshizo en disculpas con los que ponen el pan sobre su mesa. Aquí va la expiación de culpas y la flagelación del fundador de Amazon.
La mayoría de los comentarios que recibió la carta de Bezos fueron de agradecimiento por su sinceridad y por cómo enfrentó el problema. Sin embargo, uno de ellos dio en el clavo. “Será interesante saber cómo Amazon enfrentará futuras descargas ilegales o potenciales problemas de licencias”, escribió LASoundCrafter.
¿Son suficientes las explicaciones y azotes que se dio Bezos? ¿Debería comprar los derechos de las obras y reponer los libros en los Kindle que fueron víctimas de robo? Ahora, ustedes tienen la palabra.
Link: An Apology from Amazon (Amazon vía FayerWayer Brasil)