Kevin Rose se tira un pedo y cientos de miles de personas se lo celebran. Esa es la realidad en esta industria inteligente que con rumores artificiales es capaz de generar millones en ventas.
Los rumores, las futurologías y las especulaciones se transforman en un negocio redondo gracias al poder de algunos y la ignorancia del resto de nosotros.
El secreto está en saber hacerlo bien, tan bien como Apple lo ha estado haciendo desde que Steve Jobs se regaló por US$1 al año en sueldo.
Aquí un par de secretos de la industria:
Kevin Rose recibe cientos de emails de personas que tienen algo interesante que contar o comentar. Entre ellos, y sin que Kevin necesariamente lo sepa, hay “palos blancos” o personas, en este caso de Apple, que filtran información de productos nuevos como parte de la estrategia de ruido de la empresa. ¿Qué gana Rose al dársela de futurólogo? – Respeto y más seguidores. ¿Qué gana Apple con esto? – Una pre-venta mental.
Lo mismo nos pasa a nosotros en FayerWayer, recibimos decenas de correos a diario con sugerencias y algunos secretos. Tal como pasó con el caso de la USACH el mes pasado, donde un lector nos dio la alerta y quién sabe, él pudo haber tenido una mala onda con la universidad o pudo haber sido una entidad educativa de la competencia la que nos mando la noticia (que a todo esto fue real).
Este Marketing Oral fue el que utilizó Google al crear “invitaciones exclusivas” para usar su nuevo sistema de correo Gmail hace 4 años. Fue tanto el ruido que metió, y tanta la gente que quería tener una cuenta en el sistema, que las invitaciones gratuitas se remataban hasta en US$100 en ebay. Al final del día, Gmail se transformó en un fenómeno social y en un nuevo negocio para Google.
Es por eso que cuando Apple anuncie mañana sus nuevos productos “secretos” se cierra un nuevo ciclo de Marketing en Cupertino, hasta que Kevin Rose se tire otro pedo, y la futurología 2.0 seguirá su evolución planificada.