La comunidad de fanáticos de los medios físicos entró en pánico esta semana cuando Sony anunció que dejará de fabricar discos Blu-ray grabables. Las redes se llenaron de lamentos, titulares apocalípticos y un festival de memes sobre la “muerte del Blu-ray”. Pero, como siempre, respiren profundo: el mundo no se está acabando.
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Entonces, ¿qué está pasando realmente?
Sony no está matando al Blu-ray que conocemos y amamos, ese que contiene tus películas favoritas en glorioso 4K. Lo que está dejando de fabricar son los discos grabables en casa, esos BD-R y BD-RE que solías usar para guardar fotos, música, o tus videos de las vacaciones que jamás viste de nuevo. ¿Los recuerdas? Sí, nosotros tampoco.
Según David Mackenzie, CEO de Fidelity in Motion (un estudio que trabaja con marcas de Blu-ray como Arrow Video y Warner Archive), esto no tiene nada que ver con las películas comerciales en Blu-ray.
Lo que Sony está abandonando son los discos vírgenes que ya nadie compra porque... bueno, ¿quién quiere grabar cosas en discos cuando tienes Google Drive o un pendrive de 2 TB? Esto es más sobre el avance de la tecnología que sobre el streaming aplastando al formato físico.
“Esta historia ha sido exagerada –y diría que irresponsablemente distorsionada– por algunos medios que no entienden la diferencia entre los discos grabables para uso personal y los Blu-rays comerciales”, dijo Mackenzie. Traducción: tranquilos, el Blu-ray sigue vivo y coleando.
¿Por qué Sony dejó de fabricarlos?
Muy simple: porque ya nadie los compra. La llegada del almacenamiento en la nube, los discos duros externos y las memorias USB ha hecho que los discos grabables pasen a ser reliquias de museo, junto con los MiniDiscs -¿alguien recuerda esos?- y los casetes MiniDV.
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Si alguna vez grabaste tus propios CDs con MP3 para un viaje largo o llenaste un DVD con fotos familiares, felicidades: viviste esa época dorada. Pero hoy en día, usar un disco grabable es como andar con un Walkman en 2025. Nadie lo hace, excepto tal vez algún hipster muy extremo.
El Blu-ray comercial está bien, gracias
Si eres de los que siguen coleccionando Blu-rays como si fueran obras de arte (algunas ediciones lo son), no tienes nada de qué preocuparte. Los discos comerciales, como los Blu-rays estándar y 4K UHD, seguirán saliendo. Es cierto que ya no dominan el mercado como los DVDs hace 20 años, pero todavía tienen un público fiel. Piensa en ellos como el primo cool del vinilo.
¿Quiénes están comprando Blu-rays? Gente como tú, que quiere la mejor calidad de imagen y sonido posible, que disfruta de ediciones de colección con extras, y que sabe que el streaming nunca igualará la experiencia de tener un disco físico en las manos.
¿Y por qué tanto drama?
El pánico empezó porque Best Buy anunció en 2023 que dejaría de vender discos físicos, lo que ya fue un golpe duro para los medios físicos. Pero incluso ese terremoto no logró acabar con el Blu-ray. Las películas en Blu-ray siguen disponibles en línea, y marcas como Criterion y Arrow Video continúan lanzando ediciones increíbles.
Mackenzie compara al Blu-ray con el vinilo: no será un formato masivo nunca más, pero tiene su nicho. Mientras haya gente que quiera calidad y no solo conveniencia, el Blu-ray seguirá existiendo.
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Conclusión: Relax, el Blu-ray no se va a ninguna parte
¿Sony dejó de fabricar discos grabables? Sí. ¿Eso significa que tus películas favoritas desaparecerán? Absolutamente no. Los Blu-rays comerciales no están en peligro, y el mercado sigue ahí para quienes los valoran. Así que, si amas el cine y te importa la calidad, sigue comprando tus ediciones favoritas y agrandando tu colección.
¿Y si extrañas grabar cosas en discos? Bueno, tal vez es hora de desempolvar ese USB que tienes tirado en un cajón. El futuro está aquí, pero tus Blu-rays aún están seguros.