En el CES 2025, hay algo que es imposible ignorar: la inteligencia artificial está en todas partes. Es como la esfera gigante que domina Las Vegas: omnipresente, deslumbrante y un recordatorio constante de que las empresas tecnológicas tienen un mensaje claro: la IA es el futuro y quieren que sea el centro de todo en nuestras vidas digitales.
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Lo interesante aquí es que, a diferencia de tendencias pasadas (como las televisiones 3D que nadie pidió), la IA no se siente como una moda pasajera. Hay una lógica innegable detrás de su auge: su poder, versatilidad y crecimiento exponencial la convierten en algo más parecido a una revolución que a una simple innovación.
El Poder de los Datos: El Nuevo Oro Digital
Lo que empresas como Delta, BMW, Samsung, LG y otras han entendido es que el verdadero combustible de la inteligencia artificial son los datos. Durante años, estas compañías han estado recopilando información de sus sistemas y servicios, pero con la IA, finalmente están logrando unir todas esas piezas sueltas en un sistema orgánico y funcional.
Por ejemplo, Delta, que cumple 100 años en 2025, ha aprendido mucho sobre nuestras necesidades de viaje. Desde planear una escapada, empacar, llegar al aeropuerto, hasta regresar a casa, todo genera datos valiosos. Y ahora, con su nuevo asistente impulsado por IA, Concierge, Delta promete usar esos datos para hacer que viajar sea más fácil, eficiente y personalizado.
De los Aviones a los Hogares Inteligentes: La IA Está en Todo
Delta no está sola en su misión de conectar nuestras vidas con la IA. Samsung, por su parte, ha estado tratando de convencer al mundo de usar su plataforma de hogares inteligentes SmartThings durante años. Pero en 2025, el esfuerzo ha evolucionado con su nuevo enfoque “Home AI” y la iniciativa “SmartThings Everywhere”.
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Ahora, no solo podrás controlar tus electrodomésticos desde una app, sino que la IA une todos tus dispositivos de manera que realmente tiene sentido. Incluso Bixby, el asistente olvidado de Samsung, parece estar recibiendo una actualización para convertirse en una parte funcional y útil de este ecosistema.
Lo mismo ocurre con BMW, que no se conformó con solo pulir su sistema iDrive. En lugar de eso, están reimaginando el interior de sus coches con paneles que no solo muestran datos dispersos, sino que crean una experiencia de conducción personalizada. Aquí, la IA actúa como un copiloto inteligente que conecta tu vida dentro y fuera del automóvil.
¿Cuánta IA Es Demasiada?
Sin embargo, mientras más se extiende la inteligencia artificial, más preguntas surgen sobre cuánto control estamos dispuestos a ceder. Algunas compañías parecen confundir proactividad con invasividad, como lo demuestra una solución de IA de LG para automóviles que, aparentemente, observa cada uno de tus movimientos y emociones para hacer sugerencias.
Y claro, nadie quiere que su coche actúe como un psicólogo entrometido. Como bien señala la experiencia, los usuarios rechazan rápidamente este tipo de “innovaciones” invasivas, y lo que queda es un enfoque más sutil y útil.
Por otro lado, algunas empresas, como una startup de salud sexual en el CES, están adoptando un enfoque más práctico y ético. Ofrecen programas beta en los que los usuarios pueden compartir datos anónimos para que la IA aprenda y mejore el producto. Este tipo de transparencia podría ser clave para la aceptación masiva de la IA en el futuro.
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Nvidia: La Espina Dorsal de la Revolución de la IA
No se puede hablar de inteligencia artificial sin mencionar a Nvidia, que prácticamente está construyendo los cimientos tecnológicos de esta revolución. Con chips cada vez más potentes que permiten modelos más avanzados, Nvidia está en el corazón del crecimiento exponencial de la IA.
Eso sí, quedan grandes interrogantes, como el costo energético de estos avances. Pero con el tiempo (y quizás con la ayuda de la Inteligencia Artificial General, que según algunos podría estar más cerca de lo que pensamos), estos problemas podrían encontrar soluciones innovadoras.
La IA Está Aquí para Quedarse
El CES 2025 no solo mostró que la IA domina el panorama tecnológico, sino que lo hace de una forma que promete transformar nuestra vida cotidiana. Si todo funciona como se promete, la inteligencia artificial no será algo que “notemos” constantemente, sino una herramienta transparente y fluida que hará que nuestras aplicaciones, dispositivos y experiencias sean más personalizadas y eficientes.
Por supuesto, todavía hay exageraciones, como empresas prometiendo “IA para tu vida” o “IA afectuosa”. (Spoiler: la inteligencia artificial no tiene emociones reales, y preferiríamos que no intentaran fingirlas). Sin embargo, detrás del marketing, es claro que muchas compañías están apostando por el largo plazo y no solo por un golpe de notoriedad.
El CES siempre ha sido un escaparate del potencial tecnológico, y este año, la IA robó completamente el show. Desde hogares inteligentes hasta coches, aviones y todo lo demás, la inteligencia artificial se está integrando en nuestras vidas de formas que, hace solo unos años, parecían ciencia ficción.
¿Estamos listos para que la IA sea el centro de nuestro universo digital? Puede que sí, puede que no. Pero una cosa es segura: la revolución de la inteligencia artificial no se detendrá pronto. Y si todo sale bien, nuestras vidas podrían ser más fáciles, conectadas y personalizadas que nunca
