Donald Trump ganó las elecciones en Estados Unidos. Y Elon Musk podría ser parte de su equipo. El millonario dueño de la red social X dijo estar “dispuesto” a participar en la administración de Donald Trump. Y ya ha adelantado un poco de información respecto a su interés o que cargo podría ocupar.
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A pocos días de su conversación con Donald Trump en un espacio de X, Elon Musk compartió una imagen generada por inteligencia artificial en la que ostenta el cargo de secretario de Eficiencia del Gobierno (DOGE, por sus siglas en inglés). ¿Le gustará ese cargo por Dogecoin? Recordemos que esta criptomoneda está vinculada al millonario y de hecho su diminutivo es “Doge”.
En la imagen compartida en X se ve a Musk, más delgado de lo usual, vistiendo un traje negro en un podio con la leyenda “Department of Government Efficiency” con la descripción: “Estoy dispuesto a servir”.
Asesor, ¿Jefe de la Nasa?
Aunque no se han dado detalles específicos sobre qué rol desempeñaría el multimillonario en el Gobierno de Trump, la mención de un “puesto en el gabinete o como asesor” sugiere que podría tener una influencia considerable en áreas clave como la innovación tecnológica, la política energética o incluso la exploración espacial. Algunos incluso vinculan sus éxitos en SpaceX con la posibilidad de algún puesto en la NASA.
Frases que ya ha mencionado Donald Trump empujan varias de estas teorías Y no es algo aislado. De hecho, Brian Hughes, un alto asesor de la campaña republicana, llamó al CEO de Tesla un “campeón de la libertad de expresión” y dijo que si bien es prematuro discutir cualquier decisión para la próxima administración, “damos la bienvenida al entusiasmo y el apoyo de Elon Musk”.
Ahora bien, varios medios económicos han destacado que es improbable que Musk pueda ocupar un cargo público debido a sus vastos intereses empresariales privados. Los empresarios que quieren ocupar puestos en el gobierno suelen desprenderse de sus acciones y participaciones para evitar conflictos de intereses y sería difícil que Musk lo hiciera. Aunque, se puede: con constantes fiscalizaciones y otras herramientas. Es decir, sería “un poco engorroso” pero no imposible.