Una investigación publicada por el medio The Washington Post ha revelado un sorprendente capítulo en la vida de Elon Musk, el multimillonario fundador de SpaceX, Tesla y X que además, recientemente ha entrado al mundo de la política estadounidense al mostrar su total y público apoyo a Donald Trump. De acuerdo a la nota, Musk trabajó de manera ilegal en Estados Unidos durante los inicios de su carrera empresarial, una revelación que contrasta fuertemente con sus recientes posturas políticas sobre la inmigración.
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Musk con un origen que pocos conocen
El magnate de origen sudafricano llegó a California en 1995 con la intención de cursar un programa de posgrado en Stanford. Sin embargo, abandonó sus estudios para dedicarse por completo a sus proyectos empresariales, lo que, según expertos legales, lo dejó en una situación migratoria irregular. Lo anterior ya que Musk no tenía autorización para trabajar en Estados Unidos mientras construía Zip2, su primera empresa, que luego vendió por millones de dólares y le sirvió como trampolín para sus posteriores éxitos.
La ironía de esta situación es evidente ya que Musk, es uno de los mayores defensores de Donald Trump de cara a las elecciones presidenciales del 5 de noviembre y ha adoptado una postura dura contra la inmigración irregular, se encuentra en el centro de una polémica que cuestiona su propia legalidad en el país durante sus primeros años como emprendedor. El contraste entre sus acciones pasadas y sus opiniones actuales ha generado un intenso debate en las redes sociales y en los medios de comunicación.
Por su parte, Musk aún no se ha pronunciado oficialmente sobre esta investigación. De hecho, ni él ni sus representantes han ofrecido una versión de los hechos que contradiga la información publicada por The Washington Post. La falta de una respuesta por parte del empresario ha alimentado aún más la polémica y ha generado especulaciones sobre las posibles consecuencias legales de esta situación.