Google ha dado un paso importante -y no menos polémico- al anunciar la compra de electricidad de reactores nucleares modulares pequeños (SMR) de próxima generación. Este acuerdo marca el primer contrato corporativo del mundo para adquirir electricidad de SMR avanzados que aún están en desarrollo, con el objetivo de ayudar a la empresa a alcanzar sus metas climáticas.
¿Qué implica el acuerdo?
El gigante tecnológico ha firmado el acuerdo con Kairos Power, una empresa de ingeniería que planea tener su primer SMR operativo en 2030. Según el acuerdo, Google comprará electricidad de “múltiples” reactores que se construirán hasta 2035. Estos reactores son más pequeños que las centrales nucleares tradicionales, lo que los hace más accesibles, económicos y rápidos de construir.
La apuesta de Google por la energía nuclear
Este movimiento es parte de los esfuerzos de Google por aumentar su uso de energía libre de carbono, especialmente mientras sigue impulsando su infraestructura de inteligencia artificial. A pesar de los avances en energía renovable como la solar y la eólica, estas tecnologías dependen del clima y del momento del día. En cambio, las centrales nucleares, como los SMR, pueden producir electricidad las 24 horas del día, sin interrupciones.
Los desafíos del crecimiento de Google y la energía limpia
A pesar de los compromisos de Google con la sostenibilidad, incluyendo su objetivo de operar con energía libre de carbono las 24 horas para 2030, la empresa sigue enfrentando desafíos para cumplir estas metas. Según su último informe medioambiental, las emisiones totales de gases de efecto invernadero de Google han aumentado un 48% desde 2019. Esto ha hecho que cumplir con sus objetivos sea aún más difícil, en parte debido al rápido crecimiento de sus inversiones en IA.
Sundar Pichai, CEO de Google, mencionó en una entrevista reciente que la empresa está considerando inversiones adicionales en energías renovables como la solar, así como en tecnologías más avanzadas como los reactores nucleares modulares.
Grandes tecnológicas apostando por la energía nuclear
Google no es la única empresa tecnológica que ve en la energía nuclear una posible solución para su consumo de energía. Amazon Web Services compró recientemente un campus de centro de datos alimentado por una planta de energía nuclear, y Microsoft también ha firmado acuerdos para reactivar plantas nucleares cerradas, como Three Mile Island.
Lo que distingue el acuerdo de Google es que, en lugar de optar por plantas nucleares tradicionales, la empresa ha decidido apostar por reactores modulares pequeños. Estos reactores son de una décima a una cuarta parte del tamaño de las plantas nucleares convencionales, lo que los hace más asequibles y fáciles de implementar. Además, tienen la ventaja de ser más escalables y flexibles para adaptarse a diferentes ubicaciones.
Retos y oportunidades de los SMR
Aunque los reactores de próxima generación prometen ser una fuente confiable de energía libre de carbono, todavía existen preocupaciones sobre los impactos ambientales y de salud relacionados con la extracción de uranio y el manejo de residuos radiactivos.
Sin embargo, el interés de empresas como Google está acelerando el desarrollo de esta tecnología. El año pasado, la Comisión Reguladora Nuclear de EE. UU. certificó por primera vez el diseño de un SMR, y se espera que los primeros reactores de este tipo estén conectados a las redes eléctricas de EE. UU. a principios de la década de 2030.
El impacto de Google en la energía nuclear
Google espera que su acuerdo con Kairos Power pueda contribuir con hasta 500 MW de energía libre de carbono a la red eléctrica de Estados Unidos, ayudando a reducir la dependencia de fuentes de energía más contaminantes. Kairos ya comenzó la construcción de su primer reactor de demostración en Tennessee, lo que marca un importante hito en la comercialización de energía nuclear avanzada.
Según Jeff Olson, vicepresidente de Kairos Power, este acuerdo es clave para acelerar la adopción de esta tecnología y demostrar su viabilidad en el mercado, lo que podría tener un gran impacto en el futuro de la energía limpia.