A pesar del fuerte deseo de Samsung de superar a TSMC como el principal fabricante de chips por contrato en el mundo, la realidad financiera de su negocio de fabricación de chips ha sido menos que favorable. Según los analistas, el rendimiento de Samsung en este sector ha estado marcado por constantes pérdidas que ascienden a miles de millones de dólares anualmente.
Sin embargo, a pesar de estos desafíos, Samsung ha dejado claro que no tiene planes de escindir sus divisiones de fabricación de chips por contrato ni sus operaciones de chips lógicos.
¿Expansión hacia nuevos mercados?
Samsung es conocido por ser el mayor fabricante de chips de memoria a nivel mundial. No obstante, en los últimos años, ha expandido su presencia en el diseño de chips lógicos y en la fabricación de chips por contrato, con el fin de reducir su dependencia de los chips de memoria.
Esta expansión ha llevado al gigante tecnológico a invertir miles de millones de dólares en la construcción de nuevas plantas de fabricación. Sin embargo, parece que la estrategia no ha salido como se esperaba.
El problema de Samsung: Asegurar grandes contratos
Según Reuters, Samsung ha tenido dificultades para obtener grandes contratos que le permitan cubrir la capacidad de sus nuevas instalaciones. Los reportes indican que tanto el negocio de fundición como el de diseño de chips lógicos (conocido como System LSI) registraron una pérdida operativa de 3,18 billones de wones (aproximadamente 2.400 millones de dólares) en 2023. Esta cifra ha generado preocupación sobre la viabilidad a largo plazo de estas áreas de negocio.
Aún así, Jay Y. Lee mantiene el optimismo
A pesar de estos resultados negativos, Jay Y. Lee, presidente de Samsung, ha declarado públicamente que la compañía no tiene interés en deshacerse de estos negocios. “Tenemos hambre de hacer crecer el negocio. No nos interesa escindirlos”, afirmó Lee. Esto muestra el compromiso de Samsung con sus operaciones de chips lógicos y por contrato, a pesar de las pérdidas financieras que han registrado.
¿Entonces?
Para el futuro cercano, parece que Samsung está dispuesta a soportar las pérdidas mientras sigue apostando por el crecimiento de sus divisiones de chips. Se espera que estas áreas registren una pérdida adicional de 2,08 billones de wones (alrededor de 1.540 millones de dólares) en 2024. Aunque estas cifras no son alentadoras, el enfoque de Samsung se mantiene en la expansión de su capacidad y la búsqueda de una mayor cuota de mercado.
En resumen, aunque los esfuerzos de Samsung por diversificarse en la industria de los chips han enfrentado dificultades financieras, la compañía sigue comprometida con su estrategia de largo plazo. Con inversiones significativas en nuevas tecnologías y plantas, Samsung busca posicionarse como un competidor fuerte en el mercado de chips lógicos y por contrato, mientras que los resultados positivos aún están por verse.