El mundo de la literatura, el universo geek y la cultura popular están de fiesta. La famosísima “Lechuza de oro” fue encontrada. Así lo anunció el co-creador de la obra de acertijos y enigmas, Michael Becker, durante los primeros días de octubre. Tuvieron que pasar 31 años para que una persona, de quien todavía no se ha revelado su identidad, hallara el ansiado tesoro valorado actualmente en 165 mil dólares.
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La “Lechuza de oro” es la réplica de una estatuilla de bronce, con la figura del pájaro mencionado, escondido en un lugar de Francia. El escritor Régis Hauser, bajo el seudónimo de Max Valentin escribió y publicó un libro en 1993 con once acertijos, que llevan a la persona que los descubra todos, a encontrar la pieza. El responsable de hallarlo se gana el derecho de reclamar la estatuilla original, de oro y algunas piedras preciosas.
“No hay peor ciego que el que no quiere ver 1 = 530, 3 = 470...” dice uno de los acertijos, según 24Horas. “Apertura. Mi primera, primera mitad de la mitad de la primera edad, precede a mi segunda y tercera, buscando su camino...”, inicia otro de los enigmas.
Un informe de la BBC indica que Michel Becker, co-creador de la escultura, informó su hallazgo a través de un foro en la plataforma Discord, donde cazadores de tesoros habían colaborado por años para resolver el rompecabezas.
“Se está verificando una solución potencialmente ganadora”, decía un mensaje enviado al foro, a primera hora de la mañana del jueves pasado. “No sigan excavando. Confirmamos que la réplica de la lechuza de oro fue desenterrada en el transcurso de la noche de ayer, y que simultáneamente se presentó una solución”, informaron horas después.
La “Lechuza de oro” atravesó una tormenta legal
De acuerdo con una reseña de Periodista Digital, el camino hacia el tesoro estuvo lleno de dificultades, a lo largo de estos 31 años.
La búsqueda se vio afectada por disputas legales y financieras, especialmente después de que la editorial que publicó el libro quebrara, lo que llevó a que la estatua original fuera confiscada. Después de varios años de batallas judiciales, Hauser y Becker recuperaron la pieza en 2009. Desafortunadamente, Hauser falleció ese mismo año sin haber revelado la solución.
Sin embargo, en el año 2021, Becker accedió a la solución que Hauser había dejado en un viejo disquete, y en años recientes, con nuevas pistas y la cooperación de la comunidad de cazadores de tesoros, la réplica de la lechuza fue finalmente desenterrada. Aún se desconocen detalles como la identidad del ganador y el lugar exacto del hallazgo, lo que mantiene a muchos curiosos ansiosos por conocer todos los pormenores de esta épica búsqueda.
