En los últimos meses, Islandia ha sido testigo de un fenómeno inesperado: la escasez de pepinos en el mercado.
¿El culpable? Un desafío viral en TikTok, creado por el canadiense Logan Moffitt, también conocido como “Cucumber Guy”. Este joven influencer ha capturado la atención de millones de seguidores en la plataforma gracias a sus recetas innovadoras y sencillas, todas con un protagonista indiscutible: el pepino.
Todo comenzó con un video donde Moffitt preparaba una ensalada fresca y ligeramente picante a base de pepino laminado. La receta incluía salsa de soja, aceite de sésamo, ajo, chile y otros ingredientes como cebolleta, sésamo, y en algunas variaciones, queso crema o salmón ahumado.
La combinación perfecta para hacer que la receta se convirtiera rápidamente en un hit en TikTok.
Logan Moffitt, “Cucumber Guy”, y la crisis de pepinos en Islandia
Actualmente, Moffitt cuenta con más de 5.7 millones de seguidores, quienes se autodenominan como “adoradores del pepino”. Sin embargo, la fiebre por sus recetas ha tenido consecuencias inesperadas en Islandia, donde la producción local de pepinos es limitada y estacional.
La repentina demanda provocada por el éxito viral del “Cucumber Guy” ha superado la oferta disponible en el país.
Los supermercados islandeses se han quedado sin suficientes pepinos para satisfacer a los consumidores, provocando un desabastecimiento temporal.
La Asociación de Agricultores de Islandia, SFG, ha señalado que esta situación se ha visto exacerbada por el final de la temporada de cosecha, justo cuando las reservas de esta hortaliza ya estaban en descenso.
La cadena de supermercados Hagkaup reportó que las ventas de pepinos se han duplicado en las últimas semanas, aunque algunos especulan que la viralidad en TikTok no es la única causa.
A pesar de esto, el impacto de las redes sociales en los patrones de consumo ha quedado demostrado de manera indiscutible.
TikTok y su influencia en la agricultura islandesa
Lo que comenzó como una tendencia culinaria en TikTok ha escalado hasta afectar la disponibilidad de alimentos en un país entero.
Este incidente ha subrayado el poder de las modas virales para influir en aspectos tan cruciales como la agricultura y la distribución de alimentos.
Aunque la escasez de pepinos en Islandia es temporal, ha suscitado un debate sobre la capacidad de las plataformas digitales para moldear los hábitos de consumo a nivel global.
La escasez de pepinos en Islandia se debió a una combinación de factores relacionados con la producción limitada y la demanda repentina provocada por la viralidad de una tendencia en TikTok.
Factores que llevaron a la escasez:
- Producción limitada y estacional: Islandia tiene un clima frío y una temporada de cultivo corta, lo que significa que la producción de pepinos es limitada y estacional. Los cultivos se realizan en invernaderos y la cantidad de pepinos que se produce no es muy alta, incluso en su mejor momento.
- Aumento repentino de la demanda: La receta viral de Logan Moffitt, “Cucumber Guy”, en TikTok, generó un aumento masivo e inesperado en la demanda de pepinos. Millones de personas intentaron replicar la receta en sus hogares, lo que llevó a que los pepinos se convirtieran en un producto muy solicitado en los supermercados.
- Final de la temporada de cosecha: El fenómeno coincidió con el final de la temporada de cosecha de pepinos en Islandia, un momento en el que las reservas de este producto ya estaban disminuyendo. Esto hizo que la oferta disponible fuera aún más limitada justo cuando la demanda estaba en su punto más alto.
- Incapacidad para reabastecer rápidamente: Debido a la geografía y al clima de Islandia, importar grandes cantidades de pepinos en un corto período de tiempo no es tan sencillo como en otros países. Esto contribuyó a que la escasez se mantuviera durante un tiempo, mientras los proveedores luchaban por satisfacer la demanda.
Estos factores combinados llevaron a una situación en la que los supermercados islandeses no pudieron mantener un suministro adecuado de pepinos, resultando en una escasez temporal que llamó la atención de medios y consumidores por igual.