La tecnología de Inteligencia Artificial ha adquirido un peso alarmante para la comunidad de expertos en seguridad, particularmente cuando se utilizan estas plataformas para crear videos deepfake.
Tal vez el caso más reciente, popular y desestimado lo tuvimos con la cantante Taylor Swift, que terminó inundando Twitter (ahora X) y otras redes sociales con imágenes generadas por IA en donde se mostraba en situaciones comprometedoras con un realismo perturbador.
Pero alguien al parecer decidió aprovechar esta nueva era de la tecnología deepfake impulsada por Inteligencia Artificial en tiempo real para lograr un robo por USD $25 millones, marcando un claro precedente de cómo puede abusarse de todo esto.
Se trata de una historia tan elaborada y retorcida que parecería más propia de una escena de la franquicia de cintas de Misión Imposible o alguna otra película de espías. Pero no, esto es real, los videos falsos por IA pueden usarse para robar, literalmente, millones.
La historia de cómo alguien uso videos deepfake creados por Inteligencia Artificial para robarse $25 millones de dólares
Un perturbador reportaje de los colegas de South China Morning Post nos relata cómo un estafador apoyado por tecnología de Inteligencia Artificial logró robar USD $25 millones de dólares con una video conferencia telefónica falsa, montada con videos deepfake.
De acuerdo con el reporte del medio asiático el ladrón habría drenado unos HK $200 millones (dólares de Hong Kong), que equivalen a USD $25,6, de la sucursal de una empresa multinacional en China mediante el uso de tecnología inteligente de deepfake en una videoconferencia falsa.
Al parecer un empleado del departamento de finanzas de la empresa recibió un típico mensaje de phishing que decía provenir del director financiero (CFO) del Reino Unido de la firma.
El mensaje ordenaba al empleado que ejecutara una transacción secreta, pero el empleado no cayó al principio, ya que todo apuntaba a que efectivamente se trataba de un intento de estafa.
Sin embargo, su juicio cambió cuando el supuesto CFO organizó una video conferencia telefónica en donde se mostró el rostro del ejecutivo, falsificado mediante un video deepfake por AI, junto al de otros empleados de rango superior para convencer a la víctima de que transfiriera el dinero.
Al ver a sus compañeros de trabajo en video la víctima descartó que se tratara de un intento de engaño y “obedeció” la orden de su superior, comenzando con las transacciones millonarias.
El pobre sujeto realizó 15 transferencias a cinco cuentas bancarias diferentes de Hong Kong por USD $25,6 millones y fue hasta una semana después que los funcionarios reales de la empresa se enteraron de la estafa y llamaron a la policía.
Al parecer el ladrón sofisticado pudo crear los videos deepfake por Inteligencia Artificial partiendo de una serie de secuencias de audio y video encontradas en línea, ya que se se encontraban disponibles públicamente por la naturaleza de las actividades del CFO y los demás ejecutivos.
La investigación está actualmente en curso y aún no se han realizado arrestos.
