Sam Altman y su relación con la junta directiva de OpenAI es un tema que todavía sigue en observación por parte del mundo entero. La empresa manipula en primer plano uno de los avances más grandes, en materia de tecnología, de los últimos 20 años: la inteligencia artificial.
PUBLICIDAD
Por lo tanto, cada paso que dan podría ser crucial para el futuro y la seguridad de los gobiernos que manejan el mundo. La repentina remoción de Sam Altman como CEO causó revuelo en el mundo entero. La restitución del hombre en cuestión al cargo, también generó algo de suspicacia entre quienes ven con detalle los avances de la IA.
La primera decisión de removerlo del cargo habría estado relacionada a que Sam Altman avanza con nuevas tecnologías de inteligencia artificial sin prever las consecuencias para la humanidad. Entonces, su regreso tendría como condición que la junta directiva tenga mayor voto cuando sus decisiones sean consideradas como apresuradas.
Es así como nace una iniciativa de darle el poder a la junta directiva de vetar decisiones de Sam Altman, si todos están de acuerdo en que una decisión no es conveniente para la empresa.
La misma empresa informa en un comunicado que este poder de veto sobre las decisiones es parte de un nuevo plan de seguridad.
“Contamos con varios equipos de políticas y seguridad que trabajan juntos para mitigar los riesgos de la IA. Nuestro equipo de Sistemas de seguridad se enfoca en mitigar el uso indebido de los modelos y productos actuales como ChatGPT”, añadieron en su comunicado.