Stephen Hawking, Bill Gates y Elon Musk son tres de las mentes brillantes que marcaron un antes y un después en nuestros tiempos. En sus diferentes ramas aportaron avances tecnológicos y científicos sin precedentes para la humanidad. Es por eso que escucharlos preocupados por el futuro de la inteligencia artificial resultaba alarmante para cualquiera que los conociera.
Los tres coincidían en que la inteligencia artificial, si se desarrollaba de manera descontrolada y sin regulaciones gubernamentales, iba a ser el inicio del fin de nuestra raza.
Sin embargo, hay un experto argentino que afirma que los tres se equivocaron en el impacto de la inteligencia artificial en la humanidad. De hecho, afirma que él pensaba lo mismo que estas tres mentes brillantes hace 10 años, cuando ya se comenzaba a hablar del conceto de la IA.
Pero ahora, con el ChatGPT y otros mecanismos de aprendizaje automático esparcidos por el mundo, el experto dice que se transformaron en una herramienta para facilitarnos la vida.
El experto en cuestión se llama Santiago Bilinkis, y junto a Mariano Sigman, escribió el libro Artificial. La nueva inteligencia y el contorno de lo humano.
Santiago concedió una entrevista al portal de Infobae, en el que habla sobre el impacto de la IA en el mundo.
“La verdad es que no sabemos bien qué va a pasar. Si te fijas en las predicciones de hace diez años mías o de Elon Musk, Stephen Hawking o Bill Gates hablando de lo que creíamos que iba a ser la inteligencia artificial y su impacto en el mundo del trabajo, la verdad es que estuvimos equivocados”, dice Bilinkis.
“O sea, creíamos que las profesiones amenazadas eran aquellas más rutinarias, más repetitivas y ahora que tenemos inteligencia artificial descubrimos que en realidad lo que las máquinas mejor hacen son las tareas creativas. Y las profesiones que creíamos que quizás estaban más amenazadas, no lo están tanto. Y las que creíamos más seguras, no. Hace dos o tres años, la profesión más promisoria para una persona era la programación, la ingeniería informática, ingeniería de software o computación científica. Hoy sigo creyendo que son profesiones promisorias pero el trabajo propiamente dicho de programador probablemente esté entre los primeros que sea fuertemente acaparado por las máquinas”, destaca Santiago en su charla con Infobae.
“Una cosa importante para decir respecto de esta cuestión es que las máquinas seguramente no nos van a reemplazar en el sentido de que los humanos no tengamos que hacer nada”, dice el experto en una declaración que busca la calma de quienes piensan una IA nos va reemplazar en todo.
“En el uso de estas herramientas hay un humano que le pide a la máquina qué hacer, lo que actualmente se llama el prompt (todavía no hay una palabra castellana para decirlo). Pero bueno, el prompt lo indica una persona, pero sobre todo después de la respuesta de la máquina viene una decisión final ¿qué quiero hacer con esto que la máquina produjo? Y eso también sigue siendo territorio humano”, expresó.