Elon Musk tiene una fijación con la letra X que no muchos entienden. Muchas de sus empresas llevan el nombre y el reciente cambio de identidad en Twitter, que ahora se llama X, desató de nuevo la duda, de saber por qué el magnate está obsesionado con la antepenúltima letra del abecedario.
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Vamos que no solo es con las empresas. Un hijo del hombre más rico del mundo lleva la letra en su primer nombre. El bebé que tuvo con la cantante Grimes, en el 2020, se llama X AE A-XII.
Y así podemos destacar que en su poder se encuentran SpaceX, X Corp (los que compraron Twitter y el motivo del cambio a X), el modelo de Tesla X y su nueva compañía de inteligencia artificial, X.ai.
Una reseña de El Universo cita declaraciones de Julie Anderson Ankenbradnt, ejecutiva de PayPal durante los primeros años de la empresa, que trabajó y conoce de primera mano como se dio esto de la X en Elon Musk.
De hecho, ella misma recuerda que PayPal, justo antes de adquirir esta identificación relacionada a los pagos, se llamó en primer lugar X.com. La misma empresa, una de las primeras que fundó Elon Musk, le cedió el dominio al magnate y este lo agradeció en un tuit en julio del 2017.
¿Qué pasa con la X, Elon?
Julie recuerda que “hubo una noche en la que Elon y el resto de fundadores de X.com (ahora PayPal) nos sentamos alrededor de una mesa en la parte de detrás de un bar que desapareció hace mucho tiempo, el Blue Chalk, en Palo Alto”.
Relata que en uno de esos encuentros estaban intentado decidir el nombre y las opciones era Q, X o Z, acompañados del punto com.
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“Mientras ellos discutían acaloradamente sobre las asociaciones existentes de estas letras en particular, yo garabateaba horribles ideas de logotipos en una servilleta. Personalidades testarudas, ya saben. Finalmente, cuando la camarera trajo la siguiente ronda de bebidas, Elon le preguntó qué pensaba ella, y ella dijo que le gustaba X.com. Elon golpeó la mesa y dijo: ‘¡Eso es entonces!’ y todos se rieron, pero al final eso fue más o menos cómo se decidió”, contó la entonces ejecutiva de PayPal.
“Yo coincidí con la camarera en que era la mejor opción entre las tres”, añade Julie en su relato. “Siempre supimos que darle la marca adecuada costaría una cantidad exorbitante de dinero debido a las connotaciones pornográficas de la letra X, pero al final eso nunca se materializó debido a la trayectoria de la empresa. Aun así, hicimos algunas tarjetas de débito simpáticas”, puntualizó Anderson.